Todos los expertos en social media conocen al dedillo esta máxima: “no hay que alimentar a los troles”. Para el que no lo sepa, un trol es una figura que abunda en las redes sociales y que se dedica a poner a parir todo lo que hace el resto. Nunca esta satisfecho. Nunca es feliz. Le pone especialmente meterse en los perfiles de famosos y, con el hecho de que ellos son gente pública, criticar todo lo suyo. Y esto, en ocasiones, incluye a sus hijos, familia, madres… lo que se le ponga delante. Los troles destacan por su poca empatía. Pocos entienden que a quien van dirigidos sus improperios feroces es a una persona con sentimientos.
“Puta”, “mal padre”, “gordo”, “estás fingiendo un embarazo”… Con todas estas aseveraciones se las han visto estos famosos, que, hartos de callarse y de recibir golpes como si fueran un saco de boxeo, han dado un manotazo y han contestado. Mar Flores lo hizo en su día con un mensaje que encontró en Instagram en un vídeo que grabó en México. La exmodelo mostraba un idílico paisaje y una Instagramer le dijo lo siguiente: “Así ya se puede viajar!!! Con lo ke debe su marido a hacienda… me río”. Se había metido en un terreno pantanoso, y, quizás creyendo que Mar jamás le contestaría, dejó escrito ese comentario. Pero ella sí que tuvo respuesta. “Esta imagen que comparto es una consecuencia de mi trabajo... Soy muy afortunada solo con el hecho de trabajar y Vd sería más feliz si no sintiera rencor o envidia que es lo que desprenden sus palabras... Ría, ría mucho pero de alegría”. Vamos, que la energía negativa y oscura de su trol la combatió con luz. Y parece que funcionó, porque acabó borrando el comentario.
También lo ha hecho Fernando Tejero, hasta el punto que se convirtió en Trending Topic por responder (de una manera muy gráfica) a sus detractores, que criticaban sus opiniones políticas. Estas vez no hubo ni "un poquito de por favor" ni nada, los mandó a todos a le "comieran el rabo". Eso por atacarlo.
Iker Casillas también da 'ZASCAS' a los que se meten en lo que no les interesa. Un usuario le increpó a él y a otros futbolistas que las conversaciones de Twitter las mantuvieran en privado, por 'Whatsapp', entonces el portero le dijo que hacían lo que querían y que no se inmiscuyera él en su conversación.
¿Dónde está el límite? ¿Tienen que aguantar los rostros conocidos que se les acuse de todo, que se diga cosas tan hirientes como la que tuvo que leer Iker Casillas de su hijo hace un año cuando un usuario dijo que lo tirara al agua “a ver si flotaba”? Muchas celebridades han opinado al respecto, la última de ellos, nuestro bloguero, Jorge Javier Vázquez, daba su opinión de lo que supone para alguien como él lidiar a diario con esa clase de comentarios.
El debate está servido. ¿Hacen bien los famosos en contestar a los troles? ¿Cuál es la mejor manera de hacerlo? ¿Solo por ser figuras famosas deben aguantar estos embistes?