Parecía que la relación quedaba en paz y más o menos arreglada después de su último y conciliador cruce de palabras en Supervivientes 2020 pero, de nuevo, se abre un conflicto entre Rocío Flores, Gloria Camila y Ana María Aldón tras las explosivas declaraciones que ha dado Kiko Jiménez en exclusiva para Lecturas. El concursante de realities ha destapado en nuestras páginas los secretos familiares que los Ortega Mohedano desearían que no hubiesen visto la luz jamás.
Kiko ha vuelto a dar donde más duele a su expareja, quien se encarga del papel de "defensora" de Ana María. A propósito de la hipotética pero incómoda situación de que discutieran la mujer de Ortega Cano y Rocío Flores, el 'opinionista' de 'MYHYV' lo ve claro y meridiano: la dejarían totalmente vendida. Y es que sobrina y tía no solo tienen la misma opinión de la diseñadora sino que llevarían tiempo urdiendo un plan para crear el conflicto entre el torero y su esposa.
"Rocío Flores y Gloria opinan que Ana María es una interesada y que no pertenece a la familia", asegura Jiménez ante la atenta mirada de Sofía Suescun, con quien ha posado por primera vez para Lecturas. Metiendo aún más el dedo en la llaga, continúa: "No la soportan. He llegado a pensar que ambas han podido pactar para intentar dinamitar su relación con Ortega Cano, y que Ana María desaparezca de la familia, para quitársela de en medio". De ahí que, tal como confiesa durante la entrevista, "Rocío ha soltado ese comentario de Pavón", haciendo referencia a "los ojitos" que Ana María le habría "puesto" a su compañero de concurso, según la hija de Antonio David.
Esta conducta tan retorcida toma peso cuando Kiko desliza que, con él, se han comportado de manera similar. Para el novio de Sofía, Gloria Camila, en particular, no ha sido agradecida con la mujer de su progenitor. "No ha valorado todo lo que ella ha hecho por su padre y su hermano", cuenta. Durante la convivencia familiar, asegura que Gloria Camila "no soportaba que Ana María fuera una más" en casa de su padre, despreciando sus circunstancias personales y llegando a considerarla "una mujer que ha salido de una frutería para ir a vivir a una finca". "Así es ella", apostilla.
Entre sus declaraciones, Kiko tampoco ha podido evitar sentirse identificado con Ana María, asegurando que, además de "haber aguantado demasiado", la ha visto "muy absorbida por la familia de su marido". "Igual que me pasó a mí", confiesa. "Ahora estoy feliz, brillando con luz propia, pero ahí dentro te apagan son tantas dudas sobre ti. Es lo que le pasa a Ana María", concluía.