Esta fue la última foto que Daniel Sancho y Edwin Arrieta se tomaron juntos

Antes del crimen, Daniel Sancho y Edwin Arrieta se hicieron juntos una foto mientras desayunaban

Jara Bravo
Jara Bravo

Redactora digital de Lecturas

Daniel Sancho Edwin Arrieta collage

La relación entre Daniel Sancho (29 años) y Edwin Arrieta (44 años) es una de las cuestiones que más ha interesado del atroz crimen que tuvo lugar en Tailandia. Mucho se especuló sobre el tipo de vínculo que tenían, donde se habían conocido y cuáles eran sus planes. Hace unos días, en 'Y ahora Sonsoles', se mostraron varias imágenes de Sancho y Arrieta juntos, confirmando así que se conocían desde hacía tiempo. Ahora, el caso ha dado un paso mas al salir a la luz la última foto que Edwin y Daniel se tomaron juntos y solos antes de que se produjera el asesinato.

Ha sido el programa 'Mañaneros', presentado por Jaime Cantizano (50 años), quién ha hecho pública, en exclusiva, la última fotografía que el hijo de Rodolfo Sancho (48 años) y el cirujano estético se tomaron. No fue tomada en Tailandia, como cabría pensar, sino en en un chiringuito en Marbella. Según el programa, Edwin habría realizado este selfie para enviársela a una amiga suya, en Colombia.

Daniel Sancho
RTVE

En la imagen, se ve a Arrieta y Daniel, sonrientes y relajados, sentados a la mesa para desayunar. Podemos apreciar tazas de café, dos zumos y algún plato más. Un dato que la familia del médico ha querido destacar para desmentir que Sancho estuviera "obligado" a estar con Edwin.

Desde que Daniel fue detenido por el asesinato del colombiano, las únicas fotografías que habíamos visto de ellos eran de las cámaras de seguridad de los locales de Koh Phangan. De hecho, la única en que se veía a los dos era un frame de ambos sobre la moto alquilada por el hijo de Silvia Bronchalo (48 años). Ahora, poco a poco, vamos viendo más imágenes que ayudan a construir el puzzle que era la relación de Daniel y Edwin.

Las primeras imágenes juntos de Daniel Sancho y Edwin Arrieta

La imagen que 'Mañaneros' ha sacado a la luz es esencial porque sería la última que la pareja se habría tomado, de forma relajada y privada. Sin embargo, hace unos días el programa de Sonsoles Ónega (45 años), además de mostrar el vídeo de la reconstrucción del crimen, mostró algunas fotografías en las que quedaba patente que Daniel y Edwin mantenían una relación estrecha. En una de ellas, se les ve disfrutando de un plan gastronómico, mientras posan para la cámara. 

La naturaleza de su relación ha sido una de las grandes incógnitas de este caso. La confesión de Sancho parecía indicar que ambos mantenían vínculo íntimo, pero no deseado por el chef, según sus palabras. Durante estas semanas se pudo descubrir que se conocieron a través de la red social Instagram hace algo más de un año.

Daniel Sancho y Edwin Arrieta
Atresmedia

El 'flechazo' debió ser inmediato, ya que Edwin viajó a Madrid para conocer a Daniel y, desde entonces, ambos realizaron varios planes juntos. Viajes, cenas, citas en un lujoso hotel y planes con amigos mutuos marcaron su agenda durante este tiempo. Lo que empezó como una amistad parece que se transformó en algo más. De hecho, un amigo del fallecido explicó que Arrieta le habló del hijo de Bronchalo. “Me dijo que existía un chico que se llamaba Dani con el que mantiene una relación oculta y que su intención era formalizarla como pareja de hecho”, comentaba. 

Unos mensajes del móvil de Edwin, enviados a una tercera persona, demostraron este deseo de ir un paso más allá en su relación. "Como ya le comenté quiero hacer mi vida con Dani, pero no en Madrid, mándeme el presupuesto de pareja de hecho, no se preocupe por el pago, tengo cuenta en un banco de España. Ya para septiembre realizaremos todos los trámites”, reza uno de los mensajes. A pesar de todo esto, ahora mismo solo Daniel sabe a ciencia cierta cuál era la relación real que mantenían y hacia donde se encaminaban.

Rodolfo Sancho pide perdón por sus duras palabras a la prensa

La llegada de Rodolfo Sancho a Tailandia estaba rodeada de una gran expectación. El actor, que llegaba a Bangkok el pasado domingo 3 de septiembre, visitó por primera vez a su hijo este miércoles. Después de tres horas reunido con Daniel, Sancho salió, a paso apresurado de la prisión, y se acercó a los medios de comunicación allí congregados. 

Sus primeras palabras fueron para la familia Arrieta, dándoles el pésame por su terrible pérdida. También, quiso dejar claro que la gran atención mediática no la había generado él ni su familia. Con un guion para no dejarse nada, Rodolfo fue leyendo, punto por punto, todos los mensajes que quería transmitir. Llamó la atención su dureza y sequedad con los reporteros, asegurando nada más acercarse a ellos. 

"No estoy llorando por los suelos, ese no soy yo... Hay dos formas de tomarse las cosas cuando vienen  en la vida. Te lo puedes tomar como una desgracia o como un reto, lo he dicho siempre. Creo que con eso he dicho suficiente. No van a conseguir lágrimas de mí", expresaba, muy tajante. Aunque respondió a las preguntas de los periodistas, fue escueto y altivo en sus respuestas, sin ofrecer ningún dato personal o relevante. Al irse, llegó a pedir a los medios de comunicación allí reunidos que se marcharan porque no iba a volver a hablar.

Rodolfo Sancho
Antena 3

No obstante, a pesar de lo que dijo, Rodolfo volvió a aproximarse a los periodistas el día siguiente con un objetivo muy diferente: pedir perdón. El actor, arrepentido por su actitud y visiblemente afectado, ha querido "matizar un poco mis palabras de ayer". Y es que el protagonista de 'El Ministerio de el Tiempo' vivió un momento muy difícil emocionalmente, lo que provocó que hablara como lo hizo al salir de la cárcel.

"Ayer salí de vivir un momento complicado ahí dentro. Quizá la imagen que di fue muy dura, quizá prepotente, no lo sé, sabéis que siempre he tenido una sonrisa para la prensa", contaba. Era entonces cuando el actor pasó a explicar que aquello fue "un mecanismo que yo usé para sentirme firme, para sentirme fuerte y para ayudar a mi hijo", ha explicado. Rodolfo terminaba su intervención asegurando que para cualquier información debían dirigirse a Carmen Balfagón o Ramón Chippirrás, portavoces de la familia Sancho.