Cada semana en 'Supervivientes' hemos ido viendo su evolución hacia un aspecto más asilvestrado y no nos habíamos dado cuenta del radical cambio físico que ha experimentado Mila Ximénez. El reality le ha pasado como una apisonadora pero, obviando las raíces de su pelo que no se pueden disimular y las penurias que lleva acumuladas, se la ve más joven y más en forma que nunca. Con 64 años está más cerca de aventurera que se enfrenta a las bestias más temibles (y que saldría ganadora), que a la abuela de dos nietos que en realidad es (entre otras muchas cosas, claro).
Sí, pelos de loca, raíces sin teñir y nada de maquillaje que pueda matizar y disimular las arrugas. ¿Y qué? ¿La visteis sonreír? Mila vuelve a sentirse bien. Y es una sensación sincera. Después de conseguir meter su cuerpo en un vestidito de raso de la talla XS que le había dejado Carla y de que Jorge Javier le comunicara desde el plató que había perdidó 12 kilos 100 gramos en lo que lleva de concurso, el bote de alegría lo dio con todas las ganas.
Hemos recurrido a nuestra máquina del tiempo para recuperar a las múltiples Milas del pasado. Hemos recopilado las imágenes de la colaboradora de 'Sálvame' desde la década de los 80, en su etapa trabajando a las órdenes de Encarna Sánchez; sus primeras colaboraciones en la tele, los primeros 'Sálvame', el antes y después de su operación de un quiste en los ovarios en 2015, y de la Mila pre-'Supervivientes. La metamorfosis de Ximénez es espectacular. Comprobadlo y juzgad vosotros mismos.