Después de pasar 18 días en el más absoluto silencio, Edmundo Arrocet ha decidido (¡por fin!) hablar sobre su ruptura con María Teresa Campos. El humorista ha enviado un enigmático mensaje a través de su perfil de Instagram tan solo un día después de que Carmen Borrego se mostraba muy dura en exclusiva en ‘Lecturas’.
La ya ex pareja de María Teresa Campos ha escrito dos mensajes en su perfil de la mencionada red social, aunque el primero de ellos apenas ha durado 24 horas. En primer lugar, Bigote ha decidido publicar un post con un claro mensaje que no ha pasado desapercibido para su seguidores. En concreto, Arrocet ha publicado la foto de un cuadro que ha acompañado de un breve pero contundente mensaje: “El principio 2020”.
Unas palabras que parecen dejar claro que este nuevo año va a suponer un principio para Bigote tras su ruptura con María Teresa Campos. Sin embargo, las indirectas no han quedado ahí. El humorista también ha compartido unas palabras que han durado menos de un día en la mencionada red social. “Hay cuatro cosas que no se pueden recuperar: la piedra, una vez lanzada; la palabra, una vez dicha; la ocasión, una vez perdida; el tiempo, una vez desperdiciado”, escribió según ha publicado el ‘El programa de AR’. Sin embargo, ya no hay ni rastro de este mensaje en su perfil.
Estas son las primeras palabras de Edmundo Arrocet después de que el pasado 28 de diciembre Terelu Campos anunciara, vía comunicado de su madre, que la famosa pareja había decidido tomar caminos separados tras seis años de noviazgo. El humorista, que optó por refugiarse en Londres, había decidido guardar silencio.
Una actitud totalmente distinta a la de María Teresa Campos. Al contrario que Edmundo, la presentadora sí que quiso contar su versión de los hechos y confirmó que el humorista había cortado con ella a través de WhatsApp. Desde entonces, además, los familiares de la periodista se han volcado en todo momento en ella. En especial, Terelu Campos y Carmen Borrego. Esta última, además, no dudó en afirma en exclusiva para Lecturas que no pensaba “perdonar nunca a Edmundo”.