Dulce Delapiedra (49) se abre en canal para conceder a Lecturas su entrevista definitiva. Recién llegada de ‘Supervivientes’, coge las riendas de su vida por primera vez. Liberada del yugo emocional que la esclavizaba a la familia Pantoja, bucea en su pasado para relatar en exclusiva los secretos más oscuros de su vida junto a la tonadillera. Destapa por primera vez el motivo por el que no se habla con Agustín Pantoja, su enemigo más íntimo. Desconsolada, comparte en primicia su momento más duro junto a la cantante: la época en la que Julián Muñoz la acosó sexualmente, ávido por poseerla. El exalcalde no lo logró, pero el trauma aún perdura y Dulce sigue en tratamiento psiquiátrico por aquel truculento episodio. Hasta su partida a Honduras, la existencia ha sido un dulce muy amargo para la abnegada niñera de Isa Pantoja. Ahora empieza su nueva vida. Ha nacido una estrella, ávida de felicidad.
¿Tuviste una relación con Julián Muñoz?
¡No! ¡Por Dios! Lo han dado por hecho para hacer daño a Isabel y después a mí. Es mucho más doloroso de lo que la gente se imagina.
¿Qué pasó, entonces, entre Julián Muñoz y tú?
Esta persona está mal, pero yo lo estoy pasando peor y necesito contar mi verdad. Ocurrió en Marbella. Esta persona empezó a acosarme sexualmente a diario. Isabel no estaba, utilizaba el poder para que yo cediera. Quería obligarme, me pedía que subiera a su habitación y yo tenía que desaparecer de la casa. Nunca lo consiguió.
"Necesito contar mi verdad. Ocurrió en Marbella. Esta persona empezó a acosarme sexualmente a diario"
Isabel te prometió una casa si ibas a Marbella.
Eso nunca se cumplió. No quería ir, le dije que esta persona no me gustaba. No estaba nada cómoda y menos con esta situación. Le pedía respeto por Isabel siempre que se acercaba, se lo saltaba a la torera. Tuve que desconectar el teléfono de mi habitación para evitar mayores. Tenía que haber actuado, pero por evitar un escándalo me lo callé. Lo último que hubiera hecho en mi vida es ceder a sus pretensiones. Sufrí mucho, era muy doloroso tener que callarme; estaba sola, nadie lo sabía. Desde entonces estoy en tratamiento psiquiátrico, la situación era insostenible. Un día una amiga de Isabel vio el momento de quitárselo de en medio y la llamó para contarle que yo había tenido algo con esa persona.
El acoso debió de ser cada vez más evidente para que la amiga contara que teníais una relación.
Si ya lo había pasado muy mal, imagínate. Todo para evitar dolor a Isabel y resulta que el daño me lo estaba causando a mí, no a ella. Miré más por ella que por mí.
¿Ahora te arrepientes de no haber dicho nada?
Sí. Todo siempre por respeto hacia ella; no se merecía aquello, una vez más Isabel había cambiado su vida por esta persona. Por esto que no pasó nunca, estoy padeciendo yo.
Isabel se enfadó mucho y te cogió hasta del pelo.
Ella venía de viaje, llegó como una fiera. Pedía explicaciones, prefiero no recordar los detalles. Isabel me creyó cuando se lo aclaré.
¿Ahí es cuando Isabel se dio cuenta de que Julián no la quería?
Imagínate.
¿Les pasó a más mujeres en la casa?
No lo sé. Su hermana me dijo una vez que era muy putero.
¿Guardas rencor a Julián Muñoz?
No se trata de eso, me hizo muchísimo daño.
Podrás leer la entrevista completa en la revista Lecturas.