Letizia y Marie Chantal: el origen de su mal rollo

Aunque el incidente en la catedral de Mallorca avivó las llamas, su enemistad viene de largo

Actualizado a 29 de noviembre de 2018, 18:42

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Si tras la misa de Pascua en la catedral de Palma hubo algo que impactó tanto o más como el altercado entre la Reina Letizia y la Reina Sofía, sin duda fue la sorprendente e inesperada reacción de Marie Chantal de Grecia, que contraviniendo la norma no escrita entre la Realeza de no atacar públicamente a otro miembro de la Familia Real, no dudó en publicar en las redes sociales una frase tan dura como impactante: "Por fin ha enseñado su verdadera cara".

Este gesto desató el inicio de ríos de tinta que a día de hoy siguen llenando páginas acerca de la mala relación entre ambas "primas políticas", pero no es ni de lejos el origen de las desavenencias. Parece ser que, en realidad, nunca se llevaron especialmente ni llegaron a intimar. Ambas proceden de mundos completamente diferentes (Letizia del periodismo, Marie Chantal de una familia multimillonaria), y desde el principio no encontraron entre ellas demasiadas cosas en común.

Aun así, algunas fuentes indican que Marie Chantal intentó tener un cierto acercamiento a Letizia enviándole ropa de su propia firma para las pequeñas Leonor y Sofía. Por lo visto, según cuenta la web Look, la princesa griega tuvo este gesto durante dos años seguidos, pero decidió cortar por lo sano al ver que las pequeñas jamás llegaron a lucir sus modelos. Parece ser que la Reina Letizia ni siquiera tuvo el gesto de agradecerle el detalle, según cuentan las mismas fuentes.

Este sería uno de los primeros motivos de una enemistad que se ha ido fraguando el tiempo y que llegó a su cénit con el incidente de la misa de Pascua. Algunos allegados a la familia aseguran que esta situación está repercutiendo en el rey Felipe VI y su primo Pablo de Grecia, antaño íntimos amigos que actualmente parecen estar bastante más distanciados. Es más, Pablo decidió no acudir al cumpleaños de su tía, la Reina Sofía, un gesto que también ha disgustado a los reyes eméritos. Está por ver si el tiempo hace que las aguas vuelvan a su cauce o si la relación entre la familia española y la griega ha quedado tocada de por vida...

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