"El sonido más mágico que he oído en mi vida. Agradecidos por poder compartir con todos vosotros la maravillosa noticia de que tenemos un bebé en camino"... Así de emocionada anunciaba Claudia Osborne su embarazo junto a un vídeo de una ecografía. La hija de Bertín se encuentra entusiasmada con la idea de convertirse en madre junto a José Entrecanales pocos meses después de darse el 'sí, quiero' en una romántica ceremonia celebrada en Jerez de la Frontera. Este bebé, que será el séptimo nieto del presentador de Mi casa es la tuya, es muy esperado por todos pero, desgraciadamente, Claudia está sufriendo las primeras consecuencias y ha querido hablar abiertamente del tema en redes sociales.
Mientras que Violeta Mangriñán ha confesado que ya apenas entra en ciertas prendas de su vestidor, Claudia Osborne ha confesado que en este segundo trimestre de gestación está sufriendo mucha retención de líquidos, algo muy típico en las mujeres embarazadas. Y también, su cabello ha cambiado considerablemente con el paso de las semanas y ahora se encuentra mucho más seco que antes. ¿Lo mejor? Ya ha puesto remedio a todos estos problemas con dos tratamientos súper efectivos.
Claudia Osborne ha acudido a su centro de confianza para someterse a un masaje drenante y paliar así los efectos de la retención de líquidos: "Es alucinante como a medida que pasan los meses se va reteniendo más líquidos, y ahora más que nunca veo los resultados nada más levantarme de la camilla", ha confesado vía 'stories' sorprendida con el antes y el después que ha experimentado su cuerpo.
Además, su jornada de mimos no termina aquí. La hija de Bertín Osborne también ha tomado la decisión de cuidar su melena y devolverle el brillo y la hidratación que tenía antes de quedarse en cinta: "Me he hecho un tratamiento de keratina para hidratar el pelo, que desde que estoy embarazada me lo noto mucho más seco", ha revelado presumiendo de su pelazo.
Claudia cuenta los días para tener a su niña en brazos pero, hasta que ese momento llegue, va a extremar cuidados... Eso sí, no puede ocultar su felicidad cada vez que se mira al espejo y ve su barriguita. ¡Crece a pasos agigantados!