Claudia Ferranti (38 años) llegó a 'MasterChef' más tarde que el resto. Un mes después. Recibió un delantal negro en el casting de la undécima edición, algo que recibió con alegría pero también confundida. El tiempo reveló por qué el concurso le había dado esta prenda. Tras unas semanas de competición, ella y Albert, quien también se fue del proceso de selección con un delantal negro, se incorporaron a una prueba de eliminación. Ambos y Laura tuvieron que replicar un sope de Roberto Ruiz. Solo el que más se acercara al sabor original se quedaría en cocinas. Ese aspirante fue Claudia. Hasta este lunes. Jordi Cruz (44 años), Pepe Rodríguez (55 años) y Samantha Vallejo-Nágera (53 años) se han despedido de la italiana.
Las especias le jugaron una mala pasada. A ella y a gran parte de los aspirantes. 'MasterChef' dejó claro que son necesarias para dar sabor a los platos y transportarnos a otros continentes con un solo bocado. Por eso, se convirtieron en los protagonistas de la primera prueba de este lunes. Samantha insistió en que era la ocasión perfecta "para brillar", pero solo Puli y Eneko aprovecharon la ocasión. De hecho, fue la gaditana la que se hizo con el delantal dorado.
Jotha, Ana, Lluis y Claudia acabaron la prueba con un delantal negro. Esto les ha llevado ha enfrentarse a una prueba clásica del talent culinario: los duelos. Pilu, por haber ganado el delantal dorado, fue la encargada de elegir quien empezaría la prueba. "Voy a elegir a Lluis porque no quiero que se vaya a casa. Así, va a tener más oportunidades", ha dicho desde la galería.
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TVE
La dinámica de la prueba fue la misma que en ediciones anteriores, y esta vez tuvo a las gyozas como protagonistas. El aspirante elegido, en primera instancia Lluis, selecciona una campana y, tras ver el plato a cocinar, escoge un compañero para batirse en duelo en las cocinas. El mejor cocinero se salva de la eliminación y, el otro, se bate en un nuevo duelo con el adversario que elija. Lluis se midió con Claudia. La eligió porque creía que podía cocinar mejor que la italiana y así fue.
Claudia tuvo dos oportunidades más. La primera, contra Jotha y la segunda, con Ana. Su técnica para hacer gyozas fue mejorando. Sin embargo, no consiguió ser mejor que sus compañeros en ninguna de las ocasiones. Al recibir la noticia, algunos de los aspirantes se alegraron. Querían que se quedara Ana y así fue.
Antes de abandonar las cocinas de 'MasterChef', Claudia se sinceró sobre los motivos que la han llevado a colgar el delantal. "'MasterChef' es una supervivencia al límite. Hay muchos factores que entran en juego y, sobre todo, para mí el reto más grande era gestionar la parte emocional del cocina porque soy una persona fogosa y emotiva tanto para lo bueno como para lo malo. Hay que ser muy frío para que lo personal no te afecte al cocinado", ha explicado. "Ya venía echando de menos mucho a mi hijo y necesito verlo".
Claudia, de bronca en bronca
“Cuando llegó a España se enamoró del país, de su cultura y de su gente. Dice que aquí encontró la libertad que necesitaba para ser ella misma. Es una persona atrevida, juguetona, competitiva y un poco rebelde. Siempre lucha por conseguir lo que quiere hasta que lo consigue y, cuando lo logra, se siente tremendamente satisfecha”. Con esas palabras presentó Televisión Española a la actriz y presentadora de televisión italiana.
En su paso por 'MasterChef', se ha reencontrado con Miguel Bosé (67 años). "Soy tu Elsa Martinelli", dijo en referencia a 'Bosé', la ficción que repasa los principales hitos de la carrera del cantante. También se emocionó con los halagos que en más de una ocasión le dedicó el jurado y se ha quebrado al recordar a su pequeño de tan solo dos años. Claudia llegó con ganas de darlo todo, pero no ha terminado de encontrar su sitio. Incluso aseguró haber sufrido un robo: "Me falta una hoja de mi diario".