La visita de los reyes Felipe y Letizia a Paiporta (Valencia) ha estado marcada por el conflicto y los insultos . Aunque los monarcas han estado muy pendientes de todo lo que ha acontecido durante estos días tras los estragos que ha dejado la Dana, la más devastadora del siglo, la respuesta del pueblo a su llegada no ha sido buena. A pesar de que las recomendaciones del equipo de seguridad del monarca han sido que abandonase la zona y se marchara en el coche oficial, Felipe ha aguantado el tipo.
El monarca ha continuado escuchando a todos aquellos que se acercaban a hablar con él, mientras la rabia e ira de otros se plasmaba en gritos y agresiones que llegaban en forma de barro. Para muchos, el rey Felipe ha sabido gestionar la situación de manera excepcional. Pilar Eyre, experta en Casa Real, aseguraba hace unas horas que el padre de la princesa Leonor se ha “ganado el sueldo” con su actuación. Ahora, ha sido su sobrina Victoria Federica quien ha roto una lanza a favor de él.
Victoria Federica defiende a Felipe tras la tensa visita a Valencia
La joven, que suele ir con pies de plomo a la hora de hablar de su familia ante los medios y siempre intenta ser muy precavida, ha roto su silencio. A través de una significativa publicación en su cuenta oficial de Instagram, donde acumula más de 300.000 seguidores, ha salido en defensa de su tío. “El rey, que no tiene poder ejecutivo, se queda a dar la cara. Pedro Sánchez, que lo tiene, huye. Y así es como se resume todo. Un rey que sufre por su pueblo. Y un presidente que lo desprecia”, compartía en sus stories con un collage de fotografías de la dura jornada de hoy.
Como decíamos, lo que ha ocurrido hoy ha sido algo insólito, que nunca habíamos visto. De ahí que incluso Victoria Federica haya querido pronunciarse. El foco continúa sobre la Familia Real, que probablemente se pronuncie con un nuevo comunicado en las próximas horas, ya que la situación ha llegado a un punto muy extremo. Recordemos que tras cancelar la visita en Paiporta, las primeras intenciones de los monarcas eran continuar y reunirse con los vecinos de Chiva. Sin embargo, los planes cambiaban a última hora y cancelaban por completo la comitiva real.
Pilar Eyre analiza la actuación de los Reyes
La escritora y periodista no tardaba en analizar la sorprendente estampa que hemos visto durante esta mañana. Eyre lo tiene claro y reconoce que “en todos los años que llevo de periodista, jamás he visto que la vida de un rey estuviera amenazada. Hubiera podido pasar cualquier cosa, no he visto jamás a un rey cuerpo a cuerpo, con gente indignada, con gente que insulta, que amenazaba. Me he quedado delante de las imágenes boquiabierta”, confesaba en el último vídeo que ha publicado en su canal de YouTube. De hecho, Pilar va más allá y llega a lanzar una comparación de lo más significativa: “Con esto han dado una imagen extraordinaria. Este es el 23F de Felipe”, afirmaba. Matías Prats, uno de los pocos periodistas que ha podido hablar con el Rey antes de que se desatara la locura, explicaba que “me ha pedido con absoluta tranquilidad, 'Matías te atenderé más tarde, ahora mismo quiero estar con los vecinos y estar con ellos”.
Lo cierto es que el rey Felipe ha mostrado su postura totalmente inamovible, a pesar de las indicaciones de su equipo de seguridad. El Rey llegaba incluso a hablar con un grupo de jóvenes sobre la “intoxicación informativa” que existe sobre lo que está ocurriendo. Por otro lado, la postura de la Reina ha sido muy similar a la de su marido, pues también ha hablado con varias vecinas que se acercaban a ella. Durante uno de esos momentos, uno de sus escoltas era agredido, sufriendo una herida en su cabeza. Tampoco han faltado los gestos de desolación cuando escuchaba los testimonios de las vecinas. La consorte levantaba sus brazos y manos al conocer, en primera persona, los duros momentos que estaban viviendo las familias de esta localidad.
Aunque los gritos de 'fuera el Rey' no dejaban de escucharse, algunas vecinas le explicaban a la madre de la princesa Leonor que no iban dirigidos a ellos. Al igual que su marido, lejos de aceptar las indicaciones del equipo de seguridad, Letizia se resistía a montar en el coche oficial y abandonar la zona