Vestido de tweed y pendientes vintage: La reina Letizia conquista en Asturias con su look más lady y vibrante

La 44º edición de los Premios Princesa de Asturias tiene un sabor especial también para la reina Letizia (52 años). El mismo año que Leonor celebra 10 años al frente de la Fundación Princesa de Asturias, también se conmemora el 20 aniversario de la primera vez que una jovencísima Letizia Ortiz presidió estos galardones solo cinco meses después de su boda con don Felipe.

Viajar a Asturias siempre es especial para Letizia, una felicidad que se ve reflejada en su rostro. Este jueves, la consorte se daba un auténtico baño de masas a las puertas del auditorio al grito de '¡Viva la Reina!', cariño al que la madre de Leonor y Sofía respondió con cercanía y naturalidad. 

Sin tiempo que perder, la agenda oficial de los reyes y sus hijas en Asturias ha continuado esta misma mañana en el Hotel Reconquista. Don Felipe y doña Letizia, acompañados de Leonor y Sofía han recibido a todos los premiados en un acto solemne en el que la consorte ha servido de guía a sus hijas para conocer más de cerca a todos los galardonados entre los que cabe destacar a Joan Manuel Serrat o Carolina Marín, entre otros. 

La reina Letizia debutaba este año en Oviedo con un elegante vestido en color azul marino alquilado. Un diseño de escote asimétrico y favorecedor drapeado que pertenece a la firma inglesa Roland Mouret, pero que, en este caso decidió alquilar a través de Lend the Label demostrando una vez más su compromiso con la sostenibilidad.

Hoy, sorprendía con una elección igual de elegante pero mucho más viva. A juego con Leonor, la Reina ha estrenado un precioso vestido de tweed en color rosa. Una pieza invernal gracias al tejido pero que tiene el poder de destacar por encima del resto de forma instantánea. 

La prenda, cuyo origen se desconoce, destaca por el corte ajustado, las dos líneas desflecadas en la zona de la cintura y la cadera, manga francesa y la falda ligeramente de vuelo. Un vestido que se adapta a la perfección a la figura de la Reina y que se ha colado entre sus grandes favoritos de la temporada. 

Doña Letizia, que ha destacado por encima de sus dos hijas, ha combinado este vestido, inspiración para una boda de invierno, con unos salones nude a juego con su nuevo bolso. Respecto a las joyas, ha recurrido a unos preciosos pendiente de estilo vintage en oro rosa que guarda en su joyero desde hace años y que ha combinado con su anillo de Coreterno.

A diferencia de ayer, que se mostró alegre y disfrutona mientras saludaba a infinidad de caras conocidas, hoy ha recuperado esa versión más seria a lo largo de toda la audiencia. De hecho, aprovechaba los parones para compartir confidencias con Felipe o con Leonor, quien esta vez se ha colocado a su lado. 

La apuesta fuerte, estilísticamente hablando, se espera para esta misma tarde cuando doña Letizia reaparezca de forma estelar frente al Teatro Campoamor para presidir los Premios Princesa de Asturias 2024. 

Jesús Ortiz, padre de la reina Letizia, recuerda el pasado que le une a Joan Manuel Serrat

A diferencia de Paloma Rocasolano, que siempre es una de las invitadas de excepción a la ceremonia, Jesús Ortiz nunca se ha dejado por allí. No obstante, el padre de la reina Letizia sí quiso mostrar su alegría de forma pública cuando la Fundación Princesa de Asturias anunció a Joan Manuel Serrat como Premio de las Artes.

“Enhorabuena, Joan”, comenzaba su mensaje a través de su perfil en X. "Volverás a un Campoamor como el que te acogió en 1968, acompañado por el gran Teté Montoliu. Y presentado por una radiofonista local, con más de 20 años de tablas entonces, llamada Menchu Álvarez del Valle. Entre bastidores, un tal Jesús Ortiz", escribía recordando una estampa para él inolvidable pese a su corta edad.

Menchu ha estado muy presente en esta edición de los Princesa de Asturias, tanto que Leonor no dudaba en recordarla en uno de sus discursos. "Os confieso que vine muchas veces con mi madre y mi padre a Asturias durante mi niñez (...) Nuestra bisabuela nos contaba a Sofía y a mí cómo era la Asturias en la que vivió y formó su familia. Disfrutamos mucho con sus historias de la radio de aquella época. Recorrí playas preciosas, conocí montes, valles y pueblos increíbles, me aficioné a los oricios ante la cara de extrañeza de mi hermana… Las dos hemos sido muy felices aquí", recordaba con cierta nostalgia. Palabras que seguro hicieron muy feliz no solo a doña Letizia sino también a su abuelo, Jesús Ortiz.