Es rara la vez que vemos a Victoria Federica (23 años) hablando en una entrevista sobre ella y su vida privada. Aunque se trata de uno de los miembros de la Casa Real más polémicos y que más titulares acapara, no suele querer abrirse, algo que ha hecho recientemente en su última entrevista para el podcast de Vicky Martín Berrocal (51 años). La joven influencer ha charlado con la sevillana sobre su madre, lo que representa para ella ser de la familia real y sobre ser un personaje público.
Victoria Federica se abre sobre su madre, la infanta Elena
Victoria Federica se ha convertido en la absoluta protagonista del nuevo episodio de ‘A Solas’, podcast que presenta la diseñadora en su canal de YouTube, siendo el personaje elegido para dar el pistoletazo de salida a la tercera temporada de este espacio en el que entrevista a diferentes personalidades del panorama nacional. Hablando de manera bastante íntima, la joven ha querido dejar claro la relación que tiene con su madre, la infanta Elena (60 años), a la que define como “un ejemplo de todo, lo que voy a ser yo de mayor”, afirma, dejando claro la gran relación que une a madre e hija y acabando con esos rumores que, durante mucho tiempo, aseguraban que las cosas entre ellas no estaban del todo bien.
Esta afirma vivir todavía en casa con su madre, teniendo una “relación de madre-hija normal", y aseverando que son “amigas”, habiendo también recordado bonitos momentos de su infancia: "El mejor momento con ella es cuando montábamos a caballo juntas. Para mí, el campo es paz y al lado de mi madre más”, señala Victoria, que se define como “un desastre”, asegurando que no le cuenta todo a su madre porque se le olvida. Es tan importante el vínculo familiar para ella que Victoria asegura en esta charla que ha heredado “los valores que me ha dado mi familia, mis abuelos, mis padres, mis primos, mis tíos... porque al final de todos ellos aprendo algo bueno y cuando nos juntamos aprendemos todos de todos”, asegura.
Las amistades de Victoria Federica
A la hora de hacer amistades, Victoria cree que hay gente que puede acercarse por interés pero que ella no tiene problemas en abrirse a la gente y considerarles amigos rápidamente, sintiéndose cómoda desde el principio con la gente, actitud que considera podría ser “peligrosa”. De hecho, asegura poder "contar con los dedos de una mano" a sus buenos amigos, considerándose también muy amiga de ella misma, aunque afirma que “es difícil quererse a uno mismo” pero cuando se ve al espejo ve a una chica joven “que quiere comerse el mundo y la vida”. De los días negativos aprende a sacar el lado bueno de todo, asegura, aseverando también que no se cambiaría por alguien anónimo porque ella nunca ha llegado "a tener ese anonimato porque tampoco ha vivido el ser anónima".
Su faceta mas pública
De hecho, sobre su faceta pública también ha querido hablar, dejando claro que ella se considera "una persona leal y muy legal", siendo muy "transparente" y asegurando que abrió sus redes sociales para mostrar lo que ella quería de sí misma, intentando coger el control de esos titulares que no dejaban de salir sobre su persona: "A veces me privo de hacer cosas por el miedo a que haya prensa", confirma, añadiendo que está "más pendiente de lo que pasa a mi alrededor" cuando sale a cenar que de su acompañante. Vicky definía a Victoria como una joven “enjaulada”, confesando que ella misma había tenido que hacer terapia cuando se convirtió en un personaje público. Victoria dice que "muchos titulares no son verdad", siendo esos son los que más la afectan, como cuando los medios la unen a algún amigo de manera sentimental: “con amigos no puedo salir a la calle a solas”. Para llevar mejor todo esto, Victoria afirma hacer terapia, algo que la ayuda muchísimo ya que le “carga las pilas”.