Poco a poco Kate Middleton (43 años) está volviendo a la normalidad tras uno de sus peores años. La princesa de Gales, que fue diagnosticada de cáncer casi a la par que Carlos III (aunque no sabemos de qué tipo), aseguró hace meses que su regreso a las labores reales oficiales iba a ser de manera pausada porque ahora sus prioridades eran totalmente diferentes y su salud estaba en juego. De hecho, la mujer del príncipe Guillermo dejó claro que no tenía ninguna prisa.
Y aunque la futura reina de Reino Unido ha estado haciendo mucho trabajo no de manera pública sino en la intimidad para ir reincorporándose, parece que este regreso tan esperado le ha supuesto un nuevo e inesperado susto de salud. Una tensa situación que seguramente era lo que pretendía evitar cuando reveló que no iba a volver a los eventos y compromisos hasta que no estuviera recuperada al 100%.
Una fuente cercana a la familia real británica ha contado a 'The Mirror' que a pesar de que Kate estado volviendo al trabajo lentamente, la princesa ha tenido problemas de salud: "Es claramente la favorita de todos y el miembro de la corona más respetado por los ciudadanos en general, algo que ella aprecia, por supuesto, pero también la pone bajo una enorme presión porque se le pide su opinión para cada movimiento que hace la monarquía". Un estrés que sin duda quiere evitar a toda costa.
Lo cierto es que en los últimos meses Kate ha ido retomando de manera progresiva sus compromisos reales. Para cerrar el año 2024, la mujer de Guillermo se unió a la tradicional caminata hacia la iglesia el día de Navidad en Sandringham, un momento en el que Middleton irradió alegría mientras los fans le regalaban flores y regalos. Además, durante otra de sus apariciones del pasado diciembre, la mujer de Guillermo también fue vista abrazando a un paciente de cáncer después de soportar su propia y "brutal" batalla contra la enfermedad. Un gesto que fue muy apreciado por todos sus fans y que deja ver lo involucrada que está con todo lo que está relacionado con dicha afección.
¿Podría el Palacio de Buckingham anunciar durante este 2025 el regreso al circuito real de Kate a toda velocidad después todas últimas actividades, incluida su festivo concierto de villancicos en la Abadía de Westminster? Según un informante del palacio, las salidas oficiales a tiempo completo pueden todavía llevar su tiempo: "No hay ningún gran botón de reinicio que ella vaya a pulsar en enero", ha dicho en 'The Daily Mail'. "Lo que realmente veremos es una continuación lenta de Kate, algo equilibrado entre su recuperación y sus deberes de cara al público, como ya adelantó la princesa el pasado septiembre cuando advirtió que a pesar de haber completado su tratamiento todavía no estaba bien del todo", han añadido.
"El cáncer sin duda ha afectado a la percepción de su vida y a las decisiones que ha tomado durante el último año. La familia y sus hijos siguen siendo el centro de su universo. Tanto ella como Guillermo tienen un fuerte compromiso con el deber, el servicio y el uso de su plataforma para el bien, pero están trabajando en formas en las que puedan equilibrar su rol como padres con el de príncipes de Gales", ha continuado diciendo el informante.
Pero no solo eso, tal y como cuenta la fuente Kate no tendría previsto realizar grandes viajes por el extranjero, aunque podría acompañar a Guillermo en travesías más cortas si se siente con ánimo. "Se espera que el futuro rey sí emprenda varias giras internacionales en un futuro próximo", ha dicho.
Kate, en medio de los enfrentamientos entre Carlos y Guillermo
Eso sí, en medio de esta incertidumbre en cuanto a su vuelta y con el estrés y presión que le genera, Kate se ha visto en medio de los desacuerdos entre Carlos III y Guillermo. Parece que el rey y su hijo tienen bastantes disputas y es ella que debe resolverlas. "Sin duda el príncipe tiene su propia manera de hacer las cosas, algo que a veces su padre no comparte.
"Creo que él es uno de sus mayores admiradores. Comparten pasiones similares y él reconoce su capacidad de asombro, empatía y resiliencia. Ella está centrada en conseguir soluciones y es sin duda el nexo de unión entre el príncipe Guillermo y su padre", ha dicho la experta real Helena Chard, que tiene claro que la princesa es "alguien que siempre intenta ver ambos lados de cualquier enfrentamiento".