Federico de Dinamarca (55 años) nunca se ha caracterizado por tener un perfil bajo. Desde su juventud, el ahora rey se ha visto envuelto en multitud de escándalos y polémicas. Amoríos pasajeros, juergas sin fin y conductas reprobables, especialmente para un miembro de la Casa Real danesa. De hecho, una de las más sonadas casi le costó sus derechos dinásticos y le generó un apodo que a día de hoy aún se conoce. Es por eso que no es de extrañar que la popularidad del ahora rey de Dinamarca nunca haya estado por las nubes. Esto empezó a cambiar al casarse con Mary Donaldson (51 años). La predisposición de la abogada australiana por adaptarse a su nuevo hogar, aprendiendo su idioma, sus costumbres y religión, así como su elegancia y carisma hizo que se ganara el cariño de los daneses y, por extensión, mejorara la fama del entonces príncipe heredero.
El cariño por su ahora reina no ha dejado de crecer desde que entrara a formar parte de la familia real de Dinamarca hasta el punto de haber superado, con creces, a su esposo. Y aún más tras la polémica generada por las fotografías de Federico con Genoveva Casanova en Madrid, que la revista Lecturas publicó en exclusiva. La situación hizo que todos señalaran al monarca y la modelo mexicana y despertó las simpatías por Mary. Harto de que su esposa sea más popular que él mismo, Federico habría llevado a cabo un desesperado plan para ganarse el aprecio de los ciudadanos daneses.
La estrategia de Federico de Dinamarca para vencer a Mary Donaldson en popularidad
En diciembre de 2023, cuando el escándalo por las imágenes con Genoveva Casanova estaba en pleno auge, una cadena danesa realizó una encuesta sobre cual era el o la royal más apreciado por los ciudadanos. Con una clara diferencia, Mary Donaldson fue la vencedora de la opinión pública, seguida por la entonces reina Margarita y, después, su marido. Otra encuesta, esta elaborada por la agenda de noticias danesa Ritzau, apuntaba que aunque el 82% de los encuestados creían que Federico era apto, un 86% aseguraba que Mary sería una gran monarca.
Desde Casa Real se ha querido eliminar esta diferencia de popularidad entre el matrimonio con un plan para igualar a Federico con su esposa. Algo verdaderamente difícil por el mencionado sonado pasado del actual rey. ¿Cómo han planeado hacerlo? Volcándose en su esposa. Elogios, gestos de cariño y miradas de admiración han sido algunas de las nuevas actitudes de Federico hacia Mary. Pero la estocada definitiva ha sido la publicación de su propio libro justo después de ser proclamado rey.
En la obra, el padre de Christian (18 años) se presenta como un hombre moderno, enamorado y familiar que es consciente de la gran responsabilidad que implica su papel institucional. Pero lo más destacado es la forma en que se dirige a su mujer. Para Federico, él y Mary forman un gran equipo, tanto en lo personal como lo laboral. “Mary es mi compañera y mi compañera de ala, por usar una expresión de piloto, y tenemos una súper dinámica”, ha expresado el monarca.
Un halago que no es gratuito, sino que pretende ganarse los corazones de aquellos que apoyan a la australiana. Además, exponer su vida y sus sentimientos de esta manera tan pública permite a sus ciudadanos conocer quién es su monarca. O al menos la imagen que quiere representar.
Los nuevos libros sobre Federico de Dinamarca
Tanto es así que en los próximos meses se publicaran nuevos libros sobre él. El siguiente, que verá la luz el próximo 8 de febrero, será el escrito por la periodista Anne Sofie Kragh, tal como informa 'Mujer Hoy'. En él, Kragh habla de la infancia de Federico y Joaquín, sus vivencias personales y la gran transformación que vivió al entrar en el ejercito. También habrá un hueco para hablar de su relación con Mary y cómo vive la paternidad.
Apenas un mes después, se estrenará otro tomo, de la mano de Sigurd Barret, autor de varias publicaciones sobre la Corona danesa. Se tratará de un libro con ilustraciones dirigido a todos los públicos, cuyo mayor objetivo es explicar quién es Federico X y su historia familiar. En definitiva, un acercamiento al pueblo danés para volverse más humano y cercano, recuperando así parte de la fama que Mary le 'robó'.