El último encuentro entre Kate Middleton y la reina Letizia tuvo lugar el pasado lunes. La duquesa de Cambridge y la mujer de Felipe VI coincidieron en el Castillo de Windsor con motivo del nombramiento de los Caballeros de la muy Noble Orden de la Jarretera, entre los que se encontraba el monarca español.
Si algo llamó la atención de la reunión fue la frialdad existente entre ambas. Desde el principio fueron varios los gestos que evidenciaron la situación. El primero fue una falta de protocolo por parte de la mujer de Guillermo de Inglaterra. Al saludar a la doña Letizia no le hizo la reverencia correspondiente.
Hay quienes quitan hierro al asunto asegurando que Kate no hizo la reverencia a la Reina porque ya se habían visto antes y que solo se trató de un olvido. Antes del acto público tuvo lugar la ceremonia de investidura en privado y quizá allí ya se habían saludado.
Pero este no fue el único gesto que puso de manifiesto la tensión entre ambas. En el evento coincidieron subidas en uno de los carruajes. Los monarcas españoles compartieron el coche de caballos con los duques de Cambridge. Aunque las dos se mostraron muy sonrientes, durante el paseo tampoco cruzaron palabra y apenas se miraron. Don Felipe y el príncipe Guillermo sí que intercambiaron algunos comentarios.
Una vez que se bajaron del carruaje, conversaron unos segundos y se reunieron con otros de los invitados, Kate y Letizia se fueron a grupos separados. En el evento también se encontraba la reina Máxima de Holanda. Su marido el rey Guillermo también fue investido, pero en esta ocasión la reina holandesa quedó en un segundo plano.