Han sido mucho los momentos en los que la reina Letizia (51 años) ha guiado a su hija, la princesa Leonor (18 años). La hemos visto corregir su postura, alisar sus vestidos y recolocar su peinado cuando era necesario. También la hemos visto mirar divertida a su primogénita al probar, por primera vez, el champán en la comida en su honor tras jurar la Constitución. Toda una serie de gestos que demuestran que la monarca siempre ha abierto camino a su hija pequeña, llevando la voz cantante y acompañando a su hija en todos aquellos momentos que ella ya ha vivido.
Sin embargo, hay una situación que Leonor ya ha experimentado, con total naturalidad, y que su madre solo ha vivido en un par de ocasiones y de mala gana. ¿Cuál es? Pues está vinculada con la instrucción que la heredera al trono está llevando a cabo junto a sus compañeros de la academia militar de Zaragoza. Los cadetes se han desplazado hasta el Pirineo aragonés, concretamente a las zonas de Candanchú y Astún. Allí han realizado las fases de iniciación de maniobras en montaña y han recibido formación sobre como hacer frente a aludes, realizar rescates, cuidar de su propio material o explosivos.
Entre estos aprendizajes se ha sumado lograr desplazarse con esquís por este entorno. La princesa, agotada y ojerosa, ha demostrado sus conocimientos en este deporte descendiendo por varias pistas con su uniforme militar y cargada con su material de campaña. Unas imágenes que no veremos de su madre. ¿La razón? La reina Letizia odia esquiar.
El rechazo de la reina Letizia por esquiar
Si nos remontamos al inicio de la relación entre Letizia y el rey Felipe (55 años) ya se entrevía que la periodista no disfrutaba de las escapadas a la nieve. En una ocasión, el entonces príncipe se desplazó a Baqueira Beret en solitario. Y es que, aunque la reina tomó clases e intentó encontrarle el gusto a este deporte, no logró disfrutar de la experiencia.
"Si me caigo, me sacaréis, ¿no?", expresaba nerviosa en su primera experiencia allá por 2004. Pues bien, aquel día no se cayó, de hecho nunca ha sido captada en un momento embarazoso, pero dejarse caer por las montañas nevadas tampoco es algo que le apasione. Así, se dio por vencida y ha renunciado a realizar escapadas de esta índole.
La última imagen de la reina Letizia en la nieve
Las últimas imágenes que tenemos de la reina Letizia sobre unos esquís fue en 2017 cuando la familia real disfrutó de unos días de desconexión y deporte en la estación de Astún, donde ahora se encuentra la princesa. Aquel día, la reina se mostraba feliz, no tanto por la experiencia en sí, sino por estar con su familia disfrutando de unos días alejada de la agenda institucional y los compromisos reales. Se trata de una estampa histórica, ya que también fue la primera vez que vimos a Leonor y Sofía, que por entonces tenían 12 y 10 años respectivamente, disfrutar del deporte que tanto le gusta a su padre.
Los deportes favoritos de la reina Letizia
No es ningún secreto que doña Letizia es amante del deporte, disciplina que junto a su privilegiada genética le ayuda a presumir de una figura musculada a sus 51 años. "Se levanta sobre las 7.00 am y suele aprovechar para hacer algo de carrera por los jardines de Zarzuela", confesaba una fuente cercana a la Reina al diario El Mundo. Cada mañana entrena en el gimnasio alrededor de una hora bajo las pautas de su entrenador personal, sesiones de fuerza que alterna con ejercicios más aeróbicos.
Apasionada de la escalada, fue Paloma Barrientos quien reveló que la Reina mandó construir un rocódromo en la Zarzuela. Ha probado el boxeo y el yoga, disciplina que ya no puede faltar en su rutina y que, de manera terapéutica, ayuda a tonificar el cuerpo y se trabaja la elasticidad.