Salen a subasta los calzoncillos que el príncipe Harry llevó en su mítica juerga en Las Vengas

Fue uno de los escándalos más polémicos del príncipe Harry. Corría el 2012 cuando el duque de Sussex protagonizó una escapada junto a unos amigos a Las Vegas que terminó con la filtración de unas fotografías suyas en las que aparecía desnudo. Unas instantáneas que dieron la vuelta al mundo y que una década después continúan dando que hablar, después de que ahora una exstripper haya anunciado que va a vender la ropa interior que el nieto de Isabel II llevaba ese día.

La británica Carrie Reichert ha asegurado al diario ‘Mirror’ que el próximo 17 de agosto saldrán a la venta unos calzoncillos y un bañador que el príncipe Harry utilizó durante su ya mítica noche en Las Vegas. De hecho, será allí en donde se subasten ambas prendas, en el Hustler Club de la ciudad estadounidense.

El príncipe Harry, durante su discurso en la sede de la ONU

Reichert asegura que tiene en su poder la ropa interior que el marido de Meghan Markle se quitó en un juego con amigos y que protagonizaron algunas de las imágenes más polémicas del príncipe Harry, que provocaron un auténtico quebradero de cabeza en el palacio de Buckingham. Sin embargo, no será lo único que quiere vender, sino que en el lote también se encuentra el vestido que ella misma usó. Por todo ello, espera alcanzar el millón de dólares.

La mítica fiesta del príncipe Harry tuvo lugar hace ahora casi una década. Fue en agosto de 2012 cuando el duque se desplazó hasta Las Vegas con sus amigos para vivir unos días de desenfreno. Durante su estancia, se les ocurrió jugar una partida de Strip pool en la habitación de hotel junto a algunas chicas que habían conocido un rato antes. El resto de la historia es bien conocidos por todos, puesto que ‘TMZ’ publicó las imágenes.

Años después, Reichert también aprovecha para cargar contra el príncipe Harry al valorar su intervención en la ONU. Sobre él dice que es “una vergüenza que esté todo serio y malhumorado estos días” y le recomienda “soltarse el pelo de vez en cuando”.