El enfado de la reina Letizia (51 años) el día de la jura de la Constitución sigue dando qué hablar. Después de infinidad de especulaciones sobre qué habría llevado a la consorte a mostrarse así de seria e, incluso, molesta en un día tan importante para su hija Leonor, este miércoles Pilar Eyre revelaba en las páginas de Lecturas el origen de su evidente hastío.
Tal y como ha contado la escritora y experta en Casa Real, existe una "conjura" contra la Reina que habría propiciado Jaime del Burgo, quien fuera su cuñado y confidente. Después de años de silencio, el ex marido de Telma Ortiz rompía su silencio a través de su perfil de Twitter con una serie de mensajes en las que revelaba que fueron amantes entre 2010 y 2011. Lejos de quedarse ahí, del Burgo compartía una imagen privada de la Reina haciéndose un selfie frente a un espejo junto al mensaje: "Amor, llevo tu pashmina. Es como sentirte a mi lado. Me cuida, me protege. Cuento las horas para volver a vernos. Amarte. Salir de aquí. Tuya". Y afirmaba, que la entonces princesa de Asturias tenía intención de divorciarse de don Felipe para casarse con él.
Según asegura Pilar Eyre, doña Letizia supo de las intenciones de su ex cuñado el pasado 30 de octubre, lo que explicaría su actitud solo un día después. Aunque desde Casa Real han hecho oídos sordos a los ataques de Jaime del Burgo, lo cierto es que la Reina lo recibía como una "traición" por parte de una persona que fue un gran amigo para ella hasta que en 2016 se separó de su hermana, cuando sus amigos se separaron para siempre.
Leonor, un apoyo incondicional para su madre Letizia
Leonor ya no es ninguna niña y conoce muchos de los entresijos que esconde la Casa Real. Con 18 años y preparada para acceder al trono en el caso de que sea necesario, la princesa de Asturias se mostró muy protectora con su madre, un gesto que no pasó desapercibido para nadie y hoy cobra todo el sentido.
En medio de uno de los recesos del multitudinario besamanos en el Palacio Real tras la histórica jura de la Constitución, Leonor no dudó en acercarse a su madre y abrazarla de una forma muy cariñosa, gesto que Letizia respondió con una sonrisa tímida. En aquel entonces creímos que el motivo podría haber sido una indisposición de la reina, pero gracias a Pilar Eyre, conocemos el verdadero motivo. La primogénita de los reyes ya conocía a la perfección por qué su madre se encontraba mal y no dudó en mostrarle su apoyo incondicional de manera pública.
Esa unión se ha vuelto a ver repetida en la tradicional felicitación navideña que la Casa Real difundía con motivo de las próximas fiestas. Una imagen inédita tomada el mismo día y donde se percibe una conexión especial entre madre e hija que, además, aparecen con las manos unidas.
"El escándalo" de Letizia llega a la prensa internacional
Mientras que en España el silencio era sepulcral, la prensa británica empezó a hacerse eco del testimonio de Jaime del Burgo. "El escándalo", así lo tituló el prestigioso diario 'The Times' en su versión en papel, "Conmoción", decía el 'Daily Mail'.
Lo cierto es que tal y como asegura Pilar Eyre en nuestras páginas, "la Casa Real no movió un dedo para ejercer ningún tipo de censura", y los reyes Felipe y Letizia continuaron con sus compromisos institucionales como si nada pasara. Sea como fuere, lo que es una realidad, es que se trata de un tema que ha hecho temblar los cimientos de palacio en un momento que tanto el Rey como la Reina gozan de gran popularidad.