El duro sacrificio de las reinas y princesas europeas del que Letizia se libró

Charlene, Máxima de Holanda o Mary Donaldson tuvieron que hacer un gran sacrificio del que la reina Letizia se libró. ¿Cuál es?

Jara Bravo
Jara Bravo

Redactora digital de Lecturas

Letizia

No es ningún secreto que cuando una pareja de royals contrae matrimonio es habitual firmar unas capitulaciones. Una especie de contrato en el que la pareja se compromete a cumplir una serie de condiciones y exigencias que pueden marcar el futuro de esa relación. Mary Donaldson, Charlene, Máxima de Holanda, Kate Middleton, Mette Marit o la propia Letizia (51 años) son algunas de las princesas y reinas obligadas a firmar estos durísimos acuerdos. Sin embargo, la esposa de Felipe VI (55 años) se diferencia del resto de sus compañeras porque no tuvo que realizar el mismo sacrificio que algunas de ellas. ¿De qué se trata? Lo analizamos al detalle.

Estando embarazada de su segundo hijo, Federico hizo firmar a Mary Donaldson unas capitulaciones en las que quedaba sellado su futuro: la australiana renunciaba a una indemnización y poder escoger donde vivir. Además, Mary debía abandonar su Australia natal, aprender el idioma de su prometido y convertirse a la religión predominante de Dinamarca. Unas condiciones parecidas a las que tuvo que aceptar Máxima Zorreguieta cuando se enamoró de Guilllermo Alejandro de Holanda: estudió el idioma de su futuro marido y cedió en educar a sus hijos en la religión que profesaba el heredero. A esto se sumó la renunció a su propia ciudadanía, al trasladarse de Argentina a Holanda, y a sus bienes tanto monetarios como de propiedad.

Mary de Dinamarca y Letizia
Gtres

El acuerdo que firmó Charlene también es uno de los más exigente que existen. No solo porque establecía fechas incluso para la maternidad (la pareja debía estar junta por lo menos cinco años y debía darle un hijo heredero, dos condiciones más que cumplidas), sino porque fue seguido de unas segundas capitulaciones que controlaban las apariciones institucionales de Charlene junto a su marido e hijos.

En el caso de Kate Middleton no tuvo que dejar su hogar, ya que era inglesa como el príncipe, pero en caso de separarse su comportamiento seguirá estando atado al de la Casa Real británica. En caso de divorciarse, la esposa de Guillermo deberá demostrar un total decoro y decencia y tomar decisiones con mucha precaución. Por ejemplo, si decidiera volver a casarse, la suma de la pensión que le pertenece descendería. Tampoco podrá hablar a los medios de comunicación de su papel como madre y esposa, ya que revelar cualquier intimidad del matrimonio estaría castigado con una multa millonaria

El sacrificio que no tuvo que hacer Letizia al casarse con Felipe VI

Tras filtrarse la noticia de su relación, la Casa Real española se dio prisa por cerrar todos los cabos sueltos en torno al noviazgo de Felipe y Letizia. En noviembre de 2003, se anuncio el compromiso y la fecha de la boda. Junto con la organización del gran enlace también se empezó a redactar este contrato prematrimonial por si el amor se acababa. Algunos de los puntos que la periodista tuvo que firmar hablaban sobre la asignación que recibiría en caso de separarse del entonces príncipe, de las dos residencias a su disposición, la perdida de títulos nobiliarios o ceder la custodia de sus hijas (mientras fueran menores de edad) a su padre y la Casa Real.

Puntos muy parecidos a los de su compañeras, pero hubo algo que no se le exigió: que dejara su hogar. A pesar del gran cambio que supuso entrar a formar parte de la familia real, Letizia pudo continuar con una vida, más o menos, parecida a la que conocía. A día de hoy mantiene contacto con su familia, los cuales son incluidos en muchos de los planes de la agenda real, y no duda en continuar haciendo salidas la mar de normales. Por ejemplo, hace poco la vimos en una feria de bioalimentación o fue a la firma de libros de su amiga Sonsoles Ónega. 

Los medios británicos se atreven a publicar al responsable de las últimas polémicas de Letizia

Hace ya varias semanas que la reina Letizia está en el punto de mira de la prensa por los comprometedores y ultrajantes mensajes de Jaime del Burgo. El exmarido de Telma Ortiz habría compartido una serie de textos e imágenes en la red social X (antes Twitter) que buscarían desvelar una supuesta aventura con la reina cuando ya estaba casada con el rey Felipe VI. Según los medios británicos, esta polémica tiene un responsable y no es el propio Jaime.

Letizia y Juan Carlos
GTRES

Al parecer, desde la sombra, Juan Carlos I habría confabulado contra su nuera para hacerle pasar este mal trago, ayudando "a filtrar los rumores de 'affaire' de la Reina de España en un movimiento de venganza", dicen en la edición digital de Telegraph. De esta manera, James Badock no tiene ningún reparo en señalar directamente al rey emérito como uno de los artífices de uno de los momentos más complicados que está viviendo la monarca.