El rey Juan Carlos intenta dar esquinazo tras sus polémicas fotografías con Bárbara Rey

Todas las miradas se dirigen ahora mismo al rey Juan Carlos y a Bárbara Rey. La pareja aparecía besándose en unas fotografías difundidas por la revista holandesa 'Privé'. Un reportaje tomado en la casa de Boadilla que poseía la actriz y que deja en evidencia que el entonces jefe de Estado y la vedette mantuvieron una estrecha relación. El escándalo internacional estaba servido desde el primer momento y no ha hecho más que empezar.

Mientras Bárbara Rey decidía tomar acciones legales por la publicación de estas imágenes, el rey Juan Carlos mostraba su enfado a través de su entorno más cercano. La polémica ha encontrado al rey emérito en España. Juan Carlos había regresado a Sanxenxo con motivo de las regatas sin imaginar que acabaría siendo el protagonista del momento. Su plan de normalización y acercamiento ha estallado por los aires tras la publicación de estas imágenes.

El rey, de hecho, ha tenido que tomar una decisión in extremis cuando se acercaba el instante de su reaparición en público. La presencia de cámaras y reporteros en las inmediaciones de la casa de su amigo Pedro Campos es cada vez más numerosa. Todo el mundo quiere la primera imagen del rey tras el escándalo.

La decisión del rey Juan Carlos

Esta tarde de viernes el rey emérito tenía una cita en las regatas. Su barco, el Bribón salía a competir. Y como era de esperar, ni rastro del rey emérito a bordo. Juan Carlos, aquejado de graves problemas de movilidad, no se encuentra ya en forma física para este deporte. No obstante, hasta la fecha, el emérito sí se había empeñado en subirse al navío para acompañar a la tripulación siempre que su estado y el tiempo se lo permitiesen. No ha sido esta una de esas ocasiones.

Resulta patente que el escándalo de las fotografías con Bárbara Rey ha enfadado y mucho al rey emérito. Juan Carlos, tal y como confesaba la periodista Silvia Taulés, ha mostrado su disgusto a sus amigos, afirmando que esto era una cacería contra su figura. El rey tiene claro que el destinatario de todas las maniobras es él y ha querido refugiarse ante la enorme expectación mediática.

El emérito guarda silencio y preserva su imagen pública. Son mucha las polémicas que tiene sobre la mesa aunque ninguna del tamaño de sus fotografías con la que fue su pareja. Tomadas en la casa donde residía Bárbara Rey, el emérito aparece relajado y cómodo en el reportaje. ¿Cuál será el próximo movimiento en el que le podremos ver en la actualidad?

La reaparición del rey Juan Carlos

Cuando ya el rey emérito pensaba que la prensa estaba entretenida con las regatas, el emérito optaba por salir de casa de su amigo Pedro Campos. En un vehículo, sentado como copiloto, y acompañado de otros vehículos, el emérito salía a toda velocidad. Las cámaras presentes captaban la primera de las imágenes del rey Juan Carlos tras el escándalo con Bárbara Rey. Evidentemente, sin hacer declaraciones y sin querer ser captado por las cámaras, el rey se dirigía hacia un destino no especificado.

No es la primera vez que el rey Juan Carlos sale de casa de Pedro Campos intentando despistar a la prensa. Lejos quedan ya aquellas imágenes de su primer regreso a España tras la marcha a Abu Dabi. El emérito, feliz y sonriente, saludaba a los presentes. Era su gran regreso y quería que todo el mundo aplaudiese su presencia. Incluso saludó a los presentes en el club náutico. Nunca más se ha vuelto a producir esa imagen.

No es la única polémica del rey Juan Carlos

Antes de que saliesen a la luz las fotografías del rey emérito con Bárbara Rey, la polémica ya estaba servida. La prensa francesa confirmaba la noticia de la publicación de las memorias del rey Juan Carlos. Un extenso volumen que ya tenía editorial en el país galo y fecha de lanzamiento. El emérito, al parecer, había estado trabajando en este volumen desde su marcha a Abu Dabi. Una forma de contar su versión y limpiar su imagen manchada por los escándalos y la corrupción.

Con el último movimiento, estas memorias parecen haberse frenado. Así lo explicaba Laurence Debray, biógrafa del rey y amiga personal. Al parecer, el volumen ni siquiera está terminado, aseguraba a la revista 'Hola'. Algo que ha despertado numerosas reacciones ya que a través de la plataforma Amazon ya se pueden incluso reservar los primeros ejemplares. Según la versión oficial, ni hay editorial ni hay fecha de lanzamiento.

¿Ha desbaratado los planes del rey Juan Carlos la publicación de sus fotografías son Bárbara Rey? Sin duda, la casualidad es más que evidente. Desde Zarzuela tampoco se veía con muy buenos ojos que el emérito diese ese paso, ya que no puede olvidarse que se trata del anterior jefe de Estado. Con todo lo que ello conlleva. Ahora pueden respirar tranquilos, tal y como ha explicado Debray.

El panorama se complica para el rey emérito

El rey Juan Carlos pensaba pasar dos semanas en España. Era el máximo período continuado después de su marcha a Abu Dabi. La excusa oficial eran las regatas, pero detrás se escondía el plan de normalización que lleva tiempo llevando a cabo. El rey emérito sigue soñando con volver y dejar Emiratos pero sabe que, por el momento, no va a ser así. Poco a poco ha ido volviendo sin que nadie se haya dado cuenta. De hecho, ha realizado algunas visitas de las que no se ha tenido constancia a nivel público.

Juan Carlos no pernocta en Zarzuela pero sí pisa la que fue su casa. Ha estado allí en celebraciones y cumpleaños, en comidas y cenas. Luego abandona palacio para residir en un hotel o viajar directamente fuera de España. En esta ocasión, iba a permanecer dos semanas en Sanxenxo acompañado de sus íntimos amigos. Pero, ¿qué pasará a partir de ahora? El escándalo con Bárbara Rey ha vuelto a ponerle en el foco de todo.

El emérito también tiene sobre la mesa la invitación a la boda de Teodora de Grecia. La hija de Ana María de Grecia se casa este próximo fin de semana y la presencia de la reina Sofía está plenamente garantizada. Es posible que acudan también sus hijas Elena y Cristina. Más difícil que lo hagan los reyes Felipe y Letizia a pesar de que también están invitados. ¿Qué hará el rey Juan Carlos? En otro momento y a juzgar por las ganas que ha puesto en otros cónclaves de la realeza europea, podría llegar a imaginarse su presencia.