El viaje oficial por el Caribe está siendo toda una experiencia para la reina Máxima de Holanda (51 años), su marido Guillermo (55 años) y su hija la princesa Amalia (19 años). El último día en Aruba acabó para la monarquía de los Países Bajos con música caribeña y bailes, acudieron al Festival Bon Bini en Fort Zoutman donde la argentina no dudó en bailar samba junto s los bailarines profesionales que los acompañaban.
La reina Máxima se marca unos pasos de samba... mientras su hija Amalia intenta escabullirse
Guillermo de Holanda y su hija, la princesa de Orange también se atrevieron a dar unos pasos de bailes pero fueron un poco más tímidos que Máxima, que se mostraba feliz y sonriente mientras danzaba junto a los bailarines locales. La heredera al trono prefirió mantenerse en un segundo plano mientras sus padres se movían alegremente al ritmo de la música, quizás por su personalidad que sea más tímida o por verse rodeada de tanta gente en ese momento. Incluso en una ocasión opta por escabullirse entre las plumas de los trajes de los integrantes del espectáculo para pasar desapercibida.
El monarca no dudó en soltarse la melena y dejarse llevar por la música mientras recorrían algunas de las calles principales de Aruba con ritmo caribeño, sin duda fue el broche de oro. En esta última jornada en este país Máxima, Guillermo y su hija mayor pudieron conocer algunos productos locales en la plaza Padú y seguir la cultura e historia de la isla en el fuerte, allí se proyectaron unas bonitas imágenes de la princesa Amalia en las que se podía ver un corazón que enlazaba Aruba con el nombre de la mayor de las tres hijas de los reyes de los Países Bajos.
El estilismo de los monarcas holandeses su última noche en Aruba
Al tratarse de un evento informal los royals optaron por looks casuales y desenfadados. Máxima lució un vestido de seda con estampado de flores en color negro de la colombiana Johanna Ortiz. Lo combinó con un cinturón de seda con plumas en color negro de la misma firma a lo que sumó clutch dorado con un ojo de la firma Begüm Khan y sandalias de Gianvito Rossi negras con detalles metálicos.
La princesa de Orange lució un poncho con estampado de zigzag de la firma Missoni que acababa en flecos de color morado. con pantalones de color crudo, bolso de color verde de Jacquemus y sandalias de color melocotón de Gianvito Rossi y un brazalete negro de Hermès, La ocasión permitía que el rey Guillermo fuera con una camisa blanca y sin corbata pero conjuntado con un pantalón de taje y zapatos.
Sigue la ruta por los diferentes países del Caribe
Tras pasar varios días en Aruba donde han conocido más afondo el país, los reyes de los Países Bajos ponen rumbo a las demás ex colonias holandesas como Curazao. Este trayecto entre los dos países lo harán navegando en el barco de la estación Zr. Ms. Holland. Durante la travesía tendrá lugar un debate sobre el despliegue del Ministerio de Defensa holandés en el Caribe, seguido de un recorrido por el barco y diferentes demostraciones.
Una vez lleguen a Curazao será la gobernadora Lucille George-Wout la encargada de recibir a la familia real, después de la que habrá una ceremonia de bienvenida para visitar Curazao. En el Caribe, los Países Bajos cuentan con varios cuarteles repartidos para poder cumplir tres objetivos principalmente: protección de la integridad del territorio, promoción y cumplimiento del orden jurídico internacional y apoyo a las autoridades locales. En ocasiones también realizan operaciones antidrogas o en caso de emergencias también están disponibles, ya sea para rescates o para ayudar en caso de huracanes.