Es la primera vez que hemos podido ver al príncipe Harry con uniforme militar en uno de los actos oficiales tras el fallecimiento de la reina Isabel II. Si hasta el momento este honor estaba solamente designado para los miembros de la Familia Real con funciones en activo para la corona, el propio rey Carlos III ha querido que su hijo pequeño presente respetos a su abuela de la misma forma que su hermano Guillermo. Un cambio de protocolo que también ocurría este pasado viernes con el duque de York y con el que el duque de Sussex vuelve a lucir su uniforme de las Fuerzas Armadas británicas tres años después.
Todos los nietos de la reina Isabel II han participado en la última vigilia de los príncipes. Un acto solemne que no figuraba en el calendario oficial de eventos en un primer momento pero que, por la vinculación tan especial que tenían por la reina, ha tenido lugar en la tarde de este sábado. Se trata, de hecho, del último gran acto de la familia antes del funeral de Estado previsto para este próximo lunes día 19.
Los nietos de Isabel II le dan el último adiós en un acto solemne
A las 19.00 horas, todos los nietos de Isabel II hacían su aparición en el palacio de Westminster. Un cortejo encabezado por el príncipe Guillermo. Tras él, su hermano Harry, sus primas Eugenia y Beatriz, así como Zara Tindall, Peter Philips o los hijos del príncipe Eduardo, Luisa y Jacobo, todos de riguroso luto. Mientras el actual príncipe de Gales se situaba a los pies del féretro, el resto se han colocado flanqueando el ataúd con los restos mortales de Isabel II.
Tal y como manda la tradición, han guardado silencio junto al féretro de la reina dejando entrever gestos de tristeza y enorme pesar. Un acto de gran solemnidad en el que los nietos de Isabel II han recibido todo el protagonismo y donde seguro han tenido la oportunidad de recordar infinidad de felices momentos al lado de su amada 'grannie', como la llamaban cariñosamente.
"Parece que nos está uniendo a todos", exclamaba emocionado esta misma mañana Guillermo de Inglaterra en una aparición sorpresa en Lambeth, al sur de Londres, junto a su padre para agradecer todo el cariño al pueblo inglés. Unas palabras cargadas de significado que ponen de manifiesto el reencuentro afectivo con los duques de Sussex.
Tres años después...
Nos tenemos que remontar a noviembre de 2019, fecha en la que Harry se enfundó por última vez en su traje oficial de color negro con botones dorados y bandas rojas en los pantalones que acompañaba de todas sus condecoraciones. Fue durante su asistencia -junto a Meghan Markle- al tradicional Día del Recuerdo que conmemora el fin de la Primera Guerra Mundial. Solo unos meses después anunciaría su deseo de romper con todo lo relativo a la familia real, una decisión que fue un duro golpe no solo para Isabel II sino también para su padre y su hermano.