Los rumores sobre la mala relación del príncipe Harry (37 años) y Meghan Markle (42 años) con los miembros de la familia real no dejan de sucederse desde que los duques de Sussex tomaron la determinación de romper con la Casa Real en 2020. Aunque por aquel entonces, Isabel II aseguró que el vínculo afectivo seguía siendo el mismo nada más lejos de la realidad...
La mudanza del matrimonio a Estados Unidos junto a sus dos hijos, la polémica entrevista con Ophra Winfrey donde Meghan habló por primera vez del trato que recibió en palacio, el polémico documental de Netflix y, por último, la incendiaria biografía de Harry han terminado por dinamitar el poco cariño que quedaba entre el hijo pequeño de Lady Di, su padre y su hermano. El último gesto por parte de la Casa Real británica lo confirma.
Hasta ayer, el príncipe Harry seguía figurando como 'su Alteza Real' en la web oficial del palacio de Buckingham. Sin embargo, parece que algo ha cambiado y de un día para otro figura simple y llanamente como 'duque de Sussex', título que le otorgó Isabel II tras su boda con Meghan Markle. Una 'degradación' que ha tardado tres años en hacerse efectiva de manera oficial.
De esta forma, Harry y Meghan responden únicamente al título de duques de Sussex, mientras que sus hijos Archie y Lilibet son príncipe y princesa, respectivamente. Algo que sucedió inmediatamente después de que Carlos III accediera al trono. Eso sí, de la misma forma que sus padres y a diferencia de sus primos George, Charlotte y Louis, tampoco ostentarán el título de Alteza Real.
La última vez que Harry estuvo en Londres fue el pasado 6 de mayo. Aunque no tuvo un papel relevante, el joven no quiso faltar a la Coronación de Carlos III. Un hito histórico marcado por la ausencia de Meghan Markle, que prefirió quedarse en California al cuidado de sus hijos, y la frialdad que se percibió entre Harry, Guillermo y Carlos.
Meghan y Harry planean un nuevo salto mediático
Después de meses de silencio en los que el matrimonio se ha volcado en el cuidado de sus hijos, parece que Meghan y Harry están preparando una reaparición por la puerta grande. Tal y como se publicó recientemente, Archewell Production, productora que se encuentra dentro de la fundación de los duques de Sussex, producirá para Netflix una película basada en 'Meet me at the lake', un libro de Carley Fortune. Una historia que guarda grandes similitudes con su vida propia.
Esto no sería todo. Harry está inmerso en la producción de un documental propio en el que ahonda en su compromiso con los Invictus Games, las olimpiadas de veteranos de guerra que creó en 2013 y que también supuso el escenario del inicio de su historia de amor con Meghan Markle.