La princesa Leonor logra su primer gran desafío en sus primeras horas a bordo del Juan Sebastián Elcano

Al mismo tiempo que los reyes Felipe (56 años) y Letizia (52 años) reaparecían en el Palacio Real con motivo de la tradicional recepción al Cuerpo Diplomático, la princesa Leonor (19 años) daba comienzo a esas primeras horas de adaptación a bordo del Buque Escuela Juan Sebastián Elcano. 

Desde Casa Real aseguran que Leonor es "una más" entre el grupo de guardamarinas y como tal tendrá que hacer frente a una larga lista de retos entre los que se encuentra la convivencia en un espacio muy reducido, las inclemencias del mar o desafíos físicos como la tradicional subida a los altísimos mástiles del velero, que le permitirá completar su formación militar en la Armada.

Sin tiempo que perder, este jueves ha tenido lugar la primera prueba: la tradicional subida a los palos del 'Elcano'. Tal y como ha publicado 'El diario de Cádiz', Leonor ha sido vista mientras subía con soltura uno de los mástiles de 50 metros de altura. Ataviada con ropa deportiva y sin poner la vista abajo en ningún momento, la hija mayor de lo reyes ha escalado con decisión hasta alcanzar la parte superior y, posteriormente, descender. Cabe destacar que por su seguridad y la de todos sus compañeros, este tipo de pruebas se hacen con la ayuda de un arnés. 

Esta es una prueba por la que pasan todos y cada uno de los jóvenes guardamarinas, y al haberlo conseguido a la primera confirma que se encuentra en un magnífico estado físico. Una vez que estén en alta mar será una tarea mucho más complicada por el movimiento continuo del barco, de ahí que sea esencial que todos pasen por ello cuando el velero todavía se encuentra atracado en el puerto. 

Los planes de Leonor en Cádiz en vísperas de su adiós

La presencia de Leonor ha despertado un gran interés en Cádiz de ahí que a cada paso que da sea seguida por decenas de personas. Aunque durante estos días previos aún no duermen en el barco, los guardiamarinas continúan con la instrucción y cada día pasan varias horas allí para conocer lo espacios en los que convivirán, las nuevas rutinas y los trabajos que les esperan a bordo. 

A menos de 24 horas de emprender la travesía con rumbo a las Islas Canarias, su primera parada, Leonor y sus compañeros se han dejado ver por el centro de Cádiz. Todo el grupo, ataviado con el uniforme, ha disfrutado de una comida en la que seguro habrán aprovechado para compartir confidencias de cara al gran día. Muy amable, la princesa era fotografiada mientras saludaba a un grupo de jóvenes. 

Este viernes, el día promete ser muy agitado para todos los guardamarinas. Tal y como se ha anunciado, Leonor y sus compañeros comenzarán la mañana en el Ayuntamiento de Cádiz donde serán recibidos por el alcalde. Bruno García. Después se trasladarán hasta la localidad de San Fernando donde tendrán la oportunidad de visitar el Panteón y la iglesia, poniendo fin a esta breve ruta. 

Ya el sábado, los 75 guardamarinas tendrán la oportunidad de despedirse de sus seres queridos antes de embarcar rumbo a Canarias, un momento muy emotivo al que no faltarán los reyes Felipe y Letizia. 

El día a día de la princesa Leonor en el Juan Sebastián Elcano

Aunque la vela es uno de los deportes favoritos de la familia Borbón, esta es la primera vez que vamos a ver a la princesa Leonor en faena. Con esta travesía, la heredera completará su año de formación en la Armada, una experiencia inolvidable que tal y como anunció Felipe VI le cambiará la vida. 

A partir del sábado, todos los tripulantes llevarán a cabo una rutina muy marcada. En un día normal, la jornada de trabajo comenzará a las 6.45 horas, a excepción de aquellos que hayan hecho guardia nocturna. Tras asearse, ponerse el uniforme, arreglar el camarote y desayunar darán comienzo las clases y actividad deportivas previstas. A las 12.00 tendrá lugar una pequeña pausa, hasta que todos se reúnan en el comedor a eso de las 13.00 horas. 

Por la tarde, reanudan las maniobras y clases hasta las 18.00. A partir de ese momento disfrutarán de tiempo libre en el que podrán leer, escuchar música, jugar a juegos de mesa... Finalmente, todos tendrán que irse a dormir a las 22.30 horas. "Se hace todo juntos, es parte de la experiencia", explicaba la alférez de navío Ida Blanco, que afronta con ganas su segundo viaje como oficial en el Elcano y será una de las docentes de hasta las 18 asignaturas que cursan durante el viaje.