La prensa británica se pronuncia sobre la inesperada petición del príncipe Guillermo y Kate Middleton en su última salida

Aunque el 2024 empezó de forma muy complicada para la Casa Real británica, sus últimos actos y declaraciones parecen indicar que, poco a poco, las cosas van volviendo a la normalidad. Todo comenzó con el honesto vídeo de Kate Middleton (42 años) en el que confesó que padecía cáncer y que necesitaba privacidad para poder centrarse en su tratamiento y en su familia. Unos meses más tarde, la princesa de Gales volvió a aparecer para anunciar que asistiría al Trooping the Colour y que intentaría participar en algunos eventos de este verano, como el torneo de Wimbledon. 

Unos pasos al frente que dejaban más que claro que tanto Kate como el príncipe Guillermo (41 años) querían dejar atrás el blindaje y silencio que marcó los primeros meses tras la operación abdominal de la nuera de Carlos III. Sin embargo, una inesperada petición por parte de los príncipes de Gales en su última salida familiar ha vuelto a llamar la atención de la prensa británica, la cual no ha dudado en pronunciarse al respecto.

Kate Middleton y Guillermo disfrutan de una salida familiar con sus hijos George, Charlotte y Louis

A lo largo de este verano, hemos podido ver a Kate Middleton y el príncipe Guillermo en algunos actos y a través de sus redes sociales, como su mensaje tras finalizar los Juegos Olímpicos de París. Pero no ha sido lo único que han hecho. Los futuros reyes han querido pasar tiempo con sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, como una familia normal y corriente. Tal como informa el medio 'The Sun', la familia al completo participó en una batalla de Nerf en el Festival Gone Wild en Holkham Hall en Norfolk, el pasado fin de semana. ¿De qué se trata? Una experiencia única que combina varios tipos de juego de 'combate' adaptado a niños y familias, con pistolas de goma, bombas de humo y otro tipo de técnicas.

Los príncipes y sus pequeños no dudaron en unirse al resto de familias, como unos participantes más. "Me llamaron a la oficina del equipo de producción y me dijeron que una familia VIP muy especial había solicitado jugar Nerf Wars" explica al mencionado medio Georgina Barron, jefa del Norfolk Nerf Parties. "Nos preguntaron si podíamos ofrecer un juego de Nerf divertido, de alta intensidad y sin interrupciones y, por supuesto, Norfolk Nerf hizo lo que mejor sabemos hacer", seguía Barron.

El éxito fue total, ya que, según la citada publicación, los espectadores quedaron totalmente sorprendidos al ver la princesa jugar en el barro con sus hijos. También llamó la atención la ya conocida espontaneidad del príncipe Louis que gritó "¡Nerf o nada, vamos a por ello!", recoge.

La petición de Kate Middleton y el príncipe Guillermo durante el festival con sus hijos

Para poder olvidarse de su papel como personajes públicos, según la publicación inglesa, los príncipes de Gales habrían solicitado no ser fotografiados durante el evento. Algo que Georgina Barron confirma que se respetó, ya que solo querían disfrutar de "un día familiar sano como cualquier otra familia normal". 

Aunque es comprensible esta petición, la prensa británica ha señalado este hecho como algo extraño, ya que en los últimos tiempos los príncipes de Gales habían dejado de lado ese secretismo y ocultación que mantuvieron los primeros meses de la enfermedad  de Kate.

Meghan Markle vuelve a poner en jaque a Kate y Guillermo

Esta salida familiar no ha sido la única razón por la que Kate y Guillermo han vuelto al foco mediático. ¿La razón? Meghan Markle y el príncipe Harry. Los duques de Sussex han viajado hasta Colombia en una visita oficial, sin hacer caso a las recomendaciones de seguridad. Allí se reunieron con Francia Márquez, vicepresidente del gobierno de Colombia.

Sonrientes, cómplices y muy espontáneos, Meghan y Harry demostraron una vez más ser conscientes de la atención que acaparan y usarla a su beneficio. Y es que su nueva aparición ha reavivado el debate sobre su relación con los Windsor. Un vínculo que parece completamente roto y que no deja de atraer el escándalo sobre los príncipes de Gales.