Si hay un gran momento en la entrega de los Premios Princesa de Asturias, ese es sin duda el esperado discurso de la princesa Leonor. La joven de 14 años -cumplirá 15 el próximo 31 de octubre- ha pronunciado unas solemnes palabras en el que es su segundo año al frente de la fundación a la que da nombre.
La primogénita de los reyes Felipe y Letizia se ha mostrado nerviosa, incluso más que el año pasado, y sin poder evitar la emoción en algún momento ante la atenta y orgullosa mirada de los Reyes. Como era de esperar, la princesa ha dedicado unas palabras tanto a sus padres como a su hermana, la infanta Sofía, que tal y como hiciera el año pasado ha ocupado un lugar secundario al lado de su madre pero no ha perdido detalle de las palabras de su hermana mayor. "Si hay algo que mi hermana Sofía y yo hemos aprendido es el sentido de la responsabilidad", ha sido el guiño con el que le ha dado su lugar a su fiel escudera.
Como una niña de "casi 15 años", algo que ella misma se ha encargado de recordar, uno de los momentos más emotivos del breve discurso de Leonor han sido las líneas que ha dedicado a la complicada situación que atraviesa nuestro país en las que ha resaltado la labor de los sanitarios, galardonados con el Premio de la Concordia 2020. "Después de haber estado meses sin ir al colegio, la vuelta a clase nos demostró que tenemos que adaptarnos a estas nuevas circunstancias, siempre con la esperanza de que todo mejore", ha sido como ha apelado a la responsabilidad.
Para quien no ha tenido palabras en esta ocasión es para su abuela doña Sofía. A diferencia del año pasado, que sí hizo mención a ella en su discurso, esta vez no ha sido así aunque su abuela haya estado presente en el palco del Hotel Reconquista. Finalmente, a pesar de lo insólito y triste de la celebración, todos los presentes han arrancado en un caluroso aplauso al que se han sumado, como no podía ser de otra manera, los Reyes, la infanta Sofía y la reina emérita.