El 'KateGate' no para. A las imágenes de Kate Middleton (42 años) junto al príncipe Guillermo donde se la veía visiblemente recuperada y relajada mientras hacían unas compras en una tienda agrícola cercana a Windsor, se suma el intento de boicot que ha sufrido el hospital London Clinic con el objetivo de conseguir el informe médico de la princesa de Gales. Una violación a su intimidad que habría puesto en jaque la seguridad de Kate y de todos los pacientes del prestigioso centro médico.
Intentando dar normalidad a la situación, el príncipe Guillermo ha continuado con sus compromisos institucionales. Como Coronel de la Guardia Galesa, el heredero ha visitado al primer batallón de guardias galeses en su cuartel en Windsor.
Rebecca English, periodista de 'The Sun' tuvo la oportunidad de estar con Guillermo y sus sensaciones fueron claras. "Sé que está enfadado, frustrado y profundamente decepcionado por lo que ha ocurrido en las últimas semanas", apuntaba al tiempo que hacía pública la pregunta que el propio príncipe de Gales hizo al aire y que confirma su desesperación. "¿Cuándo terminará todo?", preguntó con cierta desazón.
El verdadero motivo que explica la tristeza del príncipe Guillermo
Aunque la evolución de Kate Middleton es favorable y, al fin, la podremos ver de vuelta a la vida pública en unas semanas. Hay algo que atormenta a Guillermo desde hace meses... Tal y como señala Rebecca English, el principal objetivo del heredero fue "proteger a su familia del tipo de intrusión que sufrió su madre", algo que, a la vista está, no ha conseguido. "Guillermo ha aprendido por las malas que este grado de control se extiende al conjunto de las redes sociales, que no están sujetas a la misma regulación que los medios de comunicación", apunta. Y es que según ella lo que más le preocupa son esas teorías locas que surgen en Internet y de las que medio mundo se ha hecho eco.
En menos de 24 horas, los rumores sobre que la mujer que aparecía en el vídeo no era Kate Middleton sino una doble acumularon más de 12 millones de visitas en X (antiguo Twitter) y más de 11 millones en TikTok.
A lo largo de estos meses se ha hablado que Kate habría estado en coma inducido, que se habría sometido a una operación estética, que las imágenes que circulan no es ella sino una doble. Pero no solo eso, también se ha dado peso a las voces que aseguraban que la princesa de Gales estaba sumida en una depresión a consecuencia de una infidelidad por parte de Guillermo con Rose Hunbury. Un sin fin de teorías conspiranoicas que han puesto en jaque a la Casa Real británica.
Tal y como publica 'The Sun', los príncipes de Gales están "conmocionados" por la lluvia de especulaciones "injustas y crueles" que se están haciendo sobre Kate Middleton y donde se ha llegado a poner en entredicho el estado de su matrimonio. Guillermo siente que con Carlos III y Kate fuera de juego "todo el peso del mundo cae sobre sus hombros".
La seguridad de Kate Middleton, en peligro
Por si todo el escándalo que rodea a la princesa de Gales fuera poco, este miércoles salía a la luz que el hospital donde se sometió a la cirugía había sufrido un hackeo en su base de datos con la intención de conseguir el informe médico de Kate Middleton.
"Se ha iniciado una investigación interna al comprobar que al menos un miembro del personal había intentado acceder a los registros médicos privados de Kate", especificaba 'The Mirror'. Desde el prestigioso centro médico se limitan a defender sus intereses al tiempo que advierten que "se tomarán todas las medidas investigativas, regulatorias y disciplinarias apropiadas. No hay lugar en nuestro hospital para aquellos que intencionalmente violan la confianza de cualquiera de nuestros pacientes o colegas".