Uno de los temores que existe en torno a la Familia Real británica es qué ocurrirá con su popularidad cuando fallezca la reina Isabel II. Los expertos aseguran que la popularidad disminuirá, y más teniendo en cuenta que el heredero al trono es el príncipe Carlos. El padre de Guillermo y Harry es uno de los miembros de la casa real británica que menos empatía generan y esto no ayudará a mantener en alto la imagen que sostiene la soberana.
Pero hay alguien que ha llegado recientemente a la familia que está haciendo recuperar la esperanza en que la popularidad no disminuya. Se trata de Meghan Markle. Según los expertos británicos la ex actriz es la única capaz de hacer que la buena imagen no decaiga por varios motivos.
Uno de ellos es que tanto Meghan como el príncipe Harry logran llegar a las generaciones más jóvenes. Mientras que otros miembros como el príncipe Carlos o el príncipe Guillermo y Kate Middleton resultan más fríos y distantes, los duques de Sussex cuentan con más personas que se identifican con ellos.
Otro de los motivos de confiar en Meghan Markle es la repercusión que tiene todo lo que hace. Tan solo hay que ver cómo ha funcionado la estrategia que han llevado a cabo en redes sociales. Los duques de Sussex compartían cuenta de Instagram con los duques de Cambridge hasta hace unos meses. Decidieron separarlas y en tan solo tres meses Meghan y Harry están a punto de superar en seguidores a Guillermo y Kate.
A esto hay que unir el cariño que la reina Isabel II siente por la duquesa de Sussex. Desde que Meghan llegó a la familia, la abuela de su marido ha hecho excepciones con ella que hasta ahora no había hecho con otra persona. Le ha invitado a eventos cuando todavía no estaba casada con Harry, le ha hecho regalos de lo más valiosos, ha hablado bien de ella y le ha apoyado pese a su pasado no real.
También hay que tener en cuenta que Meghan es una mujer moderna, como en su día lo fue Isabel II. Siempre aboga por la igualdad, el feminismo, es una mujer independiente, que toma sus propias decisiones. Y eso hace que además de ganarse el cariño de quienes admiran a la familia real británica, se haya convertido en una de las mujeres más influyentes a nivel internacional.