Inevitablemente, la vida de la princesa Leonor (18 años) está marcado por su papel de heredera. Desde que nació, estaba destinada a reinar. Esto hace que a sus 18 años no pueda tener una vida como la de otros jóvenes de su edad. La princesa de Asturias siempre está rodeada de fuertes medidas de seguridad, tiene compromisos institucionales que hacen que tenga que estar en continua formación, no tiene poder de decisión sobre su futuro, algo que lleva a que ahora esté cursando su formación castrense en la Academia General Militar de Zaragoza, cada uno de sus pasos es analizado… Estas son solo algunas cuestiones que hacen que no pueda disfrutar de una libertad que de vez en cuando sí que se obliga a tener, aunque sea en secreto.
La princesa de Asturias sabe bien que hacer según qué planes de vez en cuando, permite que puntualmente pueda llevar una vida propia de una joven que acaba de cumplir la mayoría de edad. Además, es así como puede disfrutar de algunas de sus aficiones y de personas cercanas a ella sin la presión mediática que tiene en cada una de sus apariciones públicas. A continuación, recopilamos cuáles han sido esos planes privados de los que Leonor ha disfrutado en los últimos meses y que han terminado viendo la luz.
Los planes privados con los que la princesa Leonor desconecta de la Corona
Por un lado, durante su estancia en Zaragoza, ha habido días en los que ha disfrutado de planes por la ciudad con sus compañeros de la Academia General Militar. La princesa de Asturias ha visitado algunos establecimientos de la capital aragonesa en los que ha disfrutado de la gastronomía típica de allí. Aunque mucho se ha hablado a lo largo de los años de la alimentación estricta que la reina Letizia impondría a sus hijas, en estas salidas Leonor comería pizzas, hamburguesas o bocadillos, dejando ver que también le gusta disfrutar de estas cosas. Y también ha salido de fiesta.
También fue en Zaragoza donde tuvo una fiesta sorpresa por su 18 cumpleaños. Los amigos que ha hecho allí quisieron sorprenderle con una celebración en un conocido restaurante de la capital aragonesa. Por tanto, aunque de cara a la galería celebró su mayoría de edad jurando la Constitución y con un almuerzo formal y familiar en el Palacio de El Pardo, no faltó esa celebración privada entre amigas muy propia de quien llega a los 18 años.
Además, son unos planes en los que ha llegado a pasar desapercibida. La heredera está totalmente integrada entre sus compañeros y cuando acude con ellos a algún lugar, hay que fijarse bien para verla porque no hace por destacar, todo lo contrario.
Lo de pasar desapercibida también lo consigue cuando hace viajes privados. Un ejemplo, el que llevó a cabo en Semana Santa. La princesa Leonor cogió un avión que le llevó hasta Nueva York. Allí se reunió con su amigo Gabriel Giacomelli, al que conoció en el internado de Gales en el que estudió Bachillerato. La hija mayor de los reyes Felipe y Letizia vivió así un viaje internacional en el que pasó completamente desapercibida y descubrió un lugar increíble en el que pudo disfrutar sin presión.
Precisamente en Gales, fue donde la princesa Leonor pudo vivir sus dos años más alejada de la Corona. Durante el tiempo que estudió en el UWC Atlantic College, en el que ahora estudia su hermana la infanta Sofía, la heredera desconectó como nunca de su rol institucional. Una desconexión que aunque ahora no puede ser igual, intenta mantener en la medida de lo posible porque sabe que a nivel mental le viene muy bien y es muy necesario para mantener el equilibrio. Así se lo han enseñado sus padres desde que era pequeña.
La filosofía de los reyes Felipe y Letizia sobre los planes privados con sus hijas
Desde siempre, los reyes Felipe y Letizia han disfrutado de planes privados. Cada verano, intentan hacer alguna escapada privada a algún lugar del mundo sin que nadie se entere. Unos días de estar completamente blindados y relajados para poder así disfrutar de una privacidad que en el día a día no suelen tener. También cuando están en Madrid o cuando pasan por Mallorca para disfrutar de sus vacaciones de verano, hacen esos planes secretos en los que no faltan el cine, el teatro, las cenas, las comidas… Cuestiones con las que desprenderse momentáneamente de ese peso que lleva formar parte de la familia real.
Por tanto, lo más probable, es que en los próximos meses la princesa Leonor vuelva a disfrutar de algún plan privado, teniendo en cuenta que se acerca el verano. El próximo mes de julio dará el pistoletazo de salida a un mes de vacaciones en el que hará apariciones públicas. No faltará su viaje familiar a Mallorca, en el que desconectará pero no del todo. Pero seguramente haya hueco para algún viaje del que nada se sepa e incluso para algunos planes en Madrid con los que recargar pilas de cara agosto, cuando ingresará en la Escuela Naval de Marín.