El último capítulo del podcast 'Corinna y el Rey' está centrado en la caída de don Juan Carlos en Botsuana (África), un polémico viaje al que también asistió Philip Atkins, primer marido de Corinna Larsen y padre de su hija Anastasia. Aunque la productora intentó contar con el testimonio del empresario para conocer qué es lo que realmente pasó, finalmente Atkins declinó la invitación porque según él todo lo que cuenta la alemana es "totalmente falso".
La expareja contrajo matrimonio en 1991 tras un breve noviazgo. Un año después darían la bienvenida a su única hija en común y en 1993 decidieron emprender caminos por separado. A pesar de la ruptura, Corinna y Philip mantuvieron una gran amistad durante años, hasta tal punto que la alemana no dudó en presentarle a don Juan Carlos. Eso sí, de esa amistad ya no queda ni rastro y es que el empresario no ha dudado en arremeter contra la madre de su hija tachándola de "peligrosa e inestable".
Al margen de la relación sentimental entre Corinna y don Juan Carlos, el Rey forjó una profunda amistad con Philip Atkins que mantienen hasta nuestros días. El empresario se convirtió en su paño de lágrimas y serio confidente cuando se rompió su historia de amor allá por 2014.
Aunque en esta ocasión Philip no ha querido dar ninguna declaración al respecto, el empresario si habló de este polémico safari que daba la vuelta al mundo: "Fue un privilegio estar allí. Corinna, su hijo y yo pasamos unos días buenísimos en la sabana africana, lo pasamos muy bien y tenemos unos recuerdos maravillosos. Fue un accidente terrible y estar en un sitio en el que no sabes exactamente dónde está la cabina o la altura de la cama… te desorienta. Es un accidente humano y es terrible. Creo que fue muy desafortunado que el Rey se cayera y se rompiera la cadera", dijo en una entrevista a Vanity Fair, una versión que nada tiene que ver a la que ha dado Larsen.