Thomas Markle, padre de Meghan, está de celebración, aunque lo cierto es que no es un momento muy feliz. Y es que el que fuera director de iluminación cumple 80 años pero no se habla con su hija desde hace seis. Ha hecho numerosos intentos por ponerse en contacto con ella para conocer a sus nietos y a su yerno pero la duquesa de Sussex no quiere saber nada de él. La relación es nula y su progenitor no sabe cómo conseguir un pequeño acercamiento, por lo que soplar las velas este 18 de julio es bastante triste.
Sin relación desde 2018, todo se tensó cuando él posó para los paparazzi antes de su boda con el príncipe Harry, Thomas sufrió dos ataques cardíacos justo antes de la ceremonia, lo que le impidió acompañar a su hija al altar (aunque dicen que los fingió). Desde entonces, Meghan y y el hijo de Carlos III no se han comunicado con él, quien jamás ha tenido la oportunidad de conocer a Archie (5 años) y Lilibet (3 años). "He tenido una buena vida y estoy orgulloso de lo que he logrado, pero todo se ha visto ensombrecido por lo que ha sucedido en los últimos seis años", aseguró a 'The Daily Mail' a principios de este año.
De hecho, Thomas ha hecho una de las declaraciones más desoladoras sobre este día tan especial. Y es que en vez de ser un momento bonito y lleno de alegría se ha convertido en uno muy amargo. "Nunca he sido muy partidario de los cumpleaños, pero sé que la persona de la que más quiero saber, Meghan, no se pondrá en contacto conmigo", ha dicho al citado medio.
Thomas tiene una casa en un acantilado en Rosarito, México, a 400 km de la mansión de 16 baños de los Sussex en Montecito. Su sala de estar está orgullosamente repleta de recuerdos de Meghan, incluidas sus fotos de la graduación del jardín de infantes Little Red Schoolhouse y de la escuela secundaria Immaculate Heart. Pero no solo eso, también hay una instantánea de padre y la hija asistiendo a los Premios Emmy cuando ella tenía unos 10 años.
La vida de Thomas Markle
El galardonado director de iluminación creció en Pensilvania con sus padres y dos hermanos. Su madre, Doris, trabajaba en una tienda de dulces en una tienda local de todo tipo de artículos, mientras que su padre, Gordon, realizaba tareas en la imprenta de la Base Aérea de Olmsted, a las afueras de Newport. La carrera de Thomas comenzó en la escuela secundaria mientras se encargaba de las producciones teatrales pero consiguió un puesto en la televisión pública de Chicago.
Durante diez años estuvo en el programa de música en directo 'Soundstage' junto a estrellas como Aretha Franklin yo Billy Joel. Después de divorciarse de su primera mujer, Rosalyn, la madre de sus hijos mayores, Samantha y Tom Jr, el padre de Meghan decidió buscar oportunidades en Hollywood, donde se hizo un hueco trabajando 'Hospital general' o 'Matrimonio con hijos'.
La madre de Meghan, Doria, trabajaba como secretaria en el mismo estudio donde ella y Thomas comenzaron una relación. Sin embargo, se divorciaron cuando su hija tenía dos años. Y cuando la progenitora de Meghan creó su negocio de exportaciones e importaciones (lo que requería muchos viajes), ella se quedó con su padre a tiempo completo.
Después de la escuela, Meghan visitaba a su padre en los set de grabación y compartían un gran vínculo. Estaban muy unidos porque él hacía un gran labor como padre, alguien que era muy cariñoso y al que le gustaba levantarse a las 5 de la mañana para ayudar a su hija a alisarse el pelo antes de ir al colegio. Y es que el cabello fue una obsesión para ella después de que por sus rizos sufriera racismo años antes. ¿Qué pasó con su relación entonces? Thomas afirmó que la fama su la cambió por completo. "La persona en que se ha convertido no es la niña que crié. Ella comenzó a ser diferente cuando vivía en Canadá filmando 'Suits' y pasaba el rato con la gente de Soho House (un club exclusivo). Empezó a actuar como si tuviera derecho a todo. Las cosas empeoraron después de que conoció a Harry. Me molesta que el nombre Markle ahora se asocie con negatividad. La gente habla de ser 'Markleada' cuando la abandonan sin motivo. Eso me entristece", relató el padre de la actriz hace unos meses.
A pesar de que es poco probable que la duquesa de Sussex descuelgue el teléfono para llamar a su padre para felicitarle (y mucho menos aparecer en el cumpleaños), lo cierto es que por suerte Thomas tiene a sus otros dos hijos que sí le quieren y se preocupan por él.