Los futuros reyes Federico (55 años) y Mary de Dinamarca (51 años) han protagonizado su primera aparición tras el anuncio de la abdicación de la reina Margarita. La soberana, cada 1 de enero, organiza una gala para recibir a las autoridades de su país. Un evento en el que suele estar acompañada de su familia. Para los todavía príncipes, este acto ha supuesto su reaparición después de saberse que el próximo 14 de enero, él pasará a ser el rey Federico X. Sabían que todas las miradas iban a estar puestas en ellos y de ahí que no hayan dejado nada a la improvisación. Entre otras cuestiones, el look de Mary ha sido de lo más significativo.
Si para cada una de sus apariciones Mary de Dinamarca piensa bien su look, esta vez no ha sido menos. Todo lo contrario. La de este 1 de enero ha sido una de sus apariciones más importantes. Además de ser la primera tras una Navidad discreta en la que han intentado paliar el revuelo causado tras las fotos que la revista Lecturas publicó en exclusiva de Federico paseando con Genoveva Casanova por Madrid, se ha convertido en su primer evento tras saber que será reina consorte. De ahí que para la ocasión haya elegido un vestido digno de este próximo rol que va a tener.
El espectacular vestido de gala de Mary de Dinamarca
Mary de Dinamarca ha lucido un espectacular vestido de terciopelo de Birgit Hallstein. Un diseño de un color de lo más potente como es el burdeos. Este es un tono que en 2024 se va a llevar mucho, que supone todo un derroche de elegancia y romanticismo, de fuerza y seguridad. Un tono con el que la futura reina consorte ha transmitido esa personalidad que requiere el título que va a estrenar en tan solo unos días.
A esto hay que sumar la silueta favorecedora de este vestido. Con cuello de barco, ceñido a la cintura con un cinturón joya, y cola, es un diseño que estiliza al máximo la figura y que además, gracias a detalles como la cola, transmite la fuerza que Mary de Dinamarca ha pretendido en esta aparición tan importante.
La tiara que ha elegido Mary de Dinamarca
Más allá del vestido, ha habido otros detalles a destacar de su estilismo para la cena de gala de Año Nuevo. En este acto, Mary de Dinamarca ha llevado tiara. De su colección, ha elegido la conocida como tiara de Rubíes o Grosellas, compuesta por brillantes y rubíes creando adornos florales. Es una tiara que ha sacado a relucir en ocasiones muy especiales para ella. Cuando cumplió 50 años, fue la joya que eligió para los retratos oficiales.
El significativo diseño de uñas rojo de Mary de Dinamarca
Lo que no nos ha pasado desapercibido, ha sido su manicura. Hay una norma no escrita sobre que las royals no lucen las uñas pintadas con colores potentes. En la mayoría de sus apariciones, las reinas y princesas suelen llevar manicuras muy naturales. Pero esta vez, Mary de Dinamarca ha roto la norma. Esta ha sido una noche de enviar el mensaje más potente a través de su look. Algo que le ha llevado a lucir uñas rojas.
Una manicura en color rojo ha sido su elección para completar su look con vestido de gala. Un color que sigue con ese mensaje de fuerza y personalidad con el que quiere transmitir que está más que preparada para ejercer como reina consorte y que tiene la fuerza suficiente para dejar las polémicas atrás y centrarse en su nueva vida, que está a tan solo unos días de arrancar.