Están siendo días muy especiales para la Casa Real española. Los reyes Felipe VI (56 años) y la reina Letizia (51 años) y sus hijas, la princesa Leonor (18 años) y la infanta Sofía (17 años) han hecho frente a varios actos clave en los últimos dos meses, como el aniversario de la proclamación de los monarcas, los Premios Princesa de Girona, el primer viaje oficial de la heredera al trono o el recibimiento de los jugadores de la Selección española tras ganar la Eurocopa.
Hoy volvían a tener una jornada muy ajetreada. Felipe, Letizia y Leonor han acudido a la Escuela Naval Militar de Marín para hacer la entrega de los Despachos a los graduados y observar la jura de bandera de los aspirantes a guardiamarina. A la vez, los futuros alumnos acudían a esta cita para conocer el centro en el que pasarán sus siguientes años. Entre ellos, se encontraba la futura reina. Y es que, en apenas un mes, la joven ingresará en esta escuela para continuar con su formación militar.
Aunque buena parte del foco mediático lo ha ocupado la nieta de la reina Sofía, las miradas también se han centrado en Letizia. Con un outfit total black, la esposa de Felipe VI ha querido acompañar a su primogénita en este día tan especial. Muy cercana y atenta, Letizia ha tenido varios gestos bonitos con su hija para transmitirle confianza y calma. Sin embargo, ha habido una conducta de la monarca que ha hecho saltar las alarmas.
La reina Letizia, muy incómoda, se sienta durante el acto en la Escuela Naval de Marín
Aunque la reina ha actuado con total normalidad durante buena parte del acto, hacia el final del mismo, Letizia ha mostrado una conducta que ha sorprendido a los asistentes. Mientras estaban en la tarima, observando a los estudiantes, la reina ha tenido que sentarse. Así es. La monarca no ha soportado el dolor y ha preferido tomar asiento.
Aunque ha mantenido la sonrisa y ha actuado con naturalidad, se notaba la incomodidad de la madre de la infanta Sofía. El motivo de este dolor es conocido por todos: su lesión en el pie derecho que agrava su Neuroma de Morton. Hace algunos meses era la propia Letizia quien contaba que se había fracturado una de las falanges de su pie. Una herida que la ha llevado ha calzar zapatos planos en los últimos meses para cuidar su lesión.
De hecho, en sus últimas apariciones sorprendía al volver a los zapatos de tacón. Esta decisión parecía indicar que su dolencia había empezado a remitir, pero con su comportamiento durante el evento de hoy, ha vuelto a despertar la preocupación sobre su lesión.
Y no solo eso. Leonor no ha dudado en acercarse a su progenitora y preocuparse por su estado. La joven le ha dado las manos a Letizia, que la ha mirado sonriente. Aunque no sabemos qué palabras intercambiaron es muy posible que la monarca quisiera que su primogénita se centrara en el acto y no en ella. Esta actitud protectora de la princesa
La reina Letizia se sienta en algunos de sus últimos actos
Esta no ha sido la primera vez que Letizia se ha sentado en uno de sus actos agendados. El más reciente fue durante el aniversario de la proclamación cuando, durante el saludo en el balcón, Letizia tuvo que sentarse, con rictus serio. "Hemos visto a la reina Letizia incómoda, sentada en algún momento y apoyándose", observaban desde RTVE. Un dolor que terminaba con la reina sentándose en uno de los momentos más visuales de los actos.
Otra ocasión fue durante su viaje de Estado a Holanda. Después de tomarse retratos oficiales junto a los reyes Guillermo y Máxima de Holanda, los monarcas holandeses y españoles pasaban al besamanos. Era allí donde, sorprendentemente, Letizia optaba por sentarse en un taburete. Una conducta que, como hoy, nadie esperaba y que despertaba la preocupación por su estado de salud.