Hasta en tres ocasiones hemos visto a Kate Middleton (41 años) en el All England Lawn Tennis and Croquet Club donde ha tenido lugar el popular torneo de Wimbledon que se ha saldado con la victoria histórica del español Carlos Alcaraz. Un despliegue de buen tenis y mucho glamour que ha contado con la princesa de Gales como mejor embajadora y gran protagonista.
El verde, el color talismán de Kate Middleton en Wimbledon
Ya sea porque es el color del torneo, porque es máxima tendencia o simplemente porque le gusta, la realidad es que en sus tres apariciones, Kate Middleton ha optado por el verde.
Del tono más pastel al más fuerte… Todos igual de elegantes, románticos e ideales para el verano.
La princesa de Gales cautivó en su debut en Wimbledon este 2023 gracias a la combinación de blazer en color verde menta y falda plisada, una creación de Balmain que se estrenaba en su vestidor por la puerta grande. Este fin de semana era un vestido verde lima con chaqueta de tweed de Self Portrait el que la hizo destacar entre la multitud de la grada. Un lookazo que dio paso a un ajustadísimo vestido con detalle de volantes en la solapa. ¡Un 10!
El motivo de las lágrimas de Kate Middleton en Wimbledon
Nos tenemos que remontar al pasado sábado, momento en el que se disputaba la final femenina entre Ons Jabeur y Marketa Vondrousova para ver como la mujer del príncipe Guillermo no pudo contener las lágrimas en medio del partido. ¿Qué le ocurrió?
Aunque durante la gran parte del juego ocultó sus ojos bajo unas oscuras gafas de sol, de cara a la recta final no dudó en dejar su rostro al descubierto. Momento en el que pasó de la efusividad al lamento en cuestión de minutos. Se desconoce si fue producto de la incomodidad del sol o de la intensidad del partido, lo cierto es que Kate fue captada mientras se secaba las lágrimas, imágenes que no tardaban en hacerse virales en redes sociales.
Al final del partido, la princesa de Gales hizo gala de su cercanía al bajar a la pista central para entregar el trofeo a la campeona y aprovechar para consolar con un cariñoso abrazo a la tunecina Ons Jabeur.
George y Charlotte, protagonistas de la final de Wimbledon
Con permiso del tenista Carlos Alcaraz y el mismísimo Brad Pitt, que se encontraba en la grada, fueron George y Charlotte quienes acapararon buena parte del protagonismo de la jornada. Tal y como ocurre en cada una de sus apariciones públicas, los pequeños (con la notable ausencia de Louis) hicieron gala de su espontaneidad y vivieron como nadie cada punto del partido.
Los hijos de los príncipes de Gales acompañaron a sus padres y a juzgar por las imágenes se lo pasaron en grande. Eso sí, las cinco horas de partido se les hicieron algo pesadas a los pequeños de 9 y 7 años respectivamente, y en un momento dado no pudieron evitar quejarse a sus padres y esbozar un divertido esbozo, un gesto más de la naturalidad que tanto enamora de George y Charlotte.
Eufóricos, así celebraron el punto que dio la victoria al tenista español. Además, su posición como príncipes les llevó a tener la oportunidad de conocer personalmente a Alcaraz, a quien saludaron con una llamativa timidez a la que no nos tienen nada acostumbrados.