Hace unos meses, cuando todo el foco mediático estaba centrado en las enfermedades del rey Carlos III (75 años) y Kate Middleton (42 años), hubo un trágico acontecimiento que desvió momentáneamente la atención de los miembros centrales de la Casa Real británica. Thomas Kingston, marido de Gabriella Windsor, hija de los príncipes de Kent y prima segunda de Carlos III, fallecía por una "herida traumática en la cabeza", tal como informaron en su momento varios medios británicos. Desde entonces las informaciones sobre este caso se han revelado a cuenta gotas para preservar el dolor y la privacidad de la familia del fallecido.
Sin embargo, esta semana, ha salido a la luz el desgarrador testimonio de Gabriella en el marco de la investigación de esta muerte. En todo este tiempo, la prima del rey no se había pronunciado sobre esta terrible noticia. De hecho, el único comunicado oficial fue de parte de la familia biológica de Kingston. Ahora, el portal 'The Telegraph' ha desvelado las palabras que la royal ha emitido durante la investigación en el Tribunal Forense de Gloucestershire.
Windsor habría decidido romper su silencio para plantear las circunstancias que rodearon el fallecimiento. En su opinión, Thomas sufrió un "impulso repentino" que lo llevó a quitarse la vida como resultado de un "efecto adverso en la medicación recetada" que se estaba tomando en aquel momento. Al parecer, Nicky Naunton Morgan, su médico de cabecera y boticario de los reyes Carlos y Camilla, le recetó zopiclona para ayudarle con sus problemas de sueño y sertralina para la ansiedad. Tras un tiempo, el fallecido dejo de tomar sertralina porque lo alteraba aún más y, más tarde, decidieron cambiarle la receta por diazepam y citalopram. Y, a todo esto, se suma que habría duplicado su dosis de medicación para dormir, según el citado medio.
El desgarrador testimonio de Gabriella Windsor sobre la muerte de su marido, Thomas Kingston
También, la viuda explicó que el trabajo de su marido se había convertido en un desafío para él, "pero dudo mucho que lo hubiera llevado a suicidarse y parecía haber mejorado mucho". Además, Gabriella asegura que "si algo lo hubiera estado preocupando, estoy segura de que habría dicho que estaba pasando por un muy difícil", ha asegurado, dejando claro que su matrimonio se basaba en el amor y la confianza, así que Thomas podría haber acudido a ella para buscar ayuda. A esto se suma que jamás había manifestado ideas suicidas o de hastío vital, ni a ella ni a sus amigos, tal como recoge 'Hello!'.
Finalmente, la joven royal terminaba argumentando que "el hecho de que se quitara la vida en la casa de sus amados padres sugiere que la decisión fue el resultado de un impulso repentino", ha afirmado antes de añadir: "A falta de pruebas de que tuviera intención de hacerlo, me parece muy probable que haya tenido una reacción adversa a las pastillas. [...] Creo que todo aquel que tome pastillas como estas debe ser más consciente de los efectos secundarios para evitar futuras muertes. Si esto le pudo pasar a Tom, le puede pasar a cualquiera".
La inesperada muerte de Thomas Kingston
Era el pasado febrero cuando la familia de Thomas Kingston daba a conocer la noticia del fallecimiento del joven a través de un comunicado emitido a través del palacio de Buckingham. "Con el más profundo dolor anunciamos la muerte de Thomas Kingston, nuestro querido marido, hijo y hermano. Tom era un hombre excepcional que iluminó las vidas de todo aquel que le conoció. Su muerte ha producido un enorme impacto en toda la familia y pedimos respetar nuestra privacidad mientras pasamos el duelo", se podía leer.
Poco después, empezaron a saberse detalles de su muerte. Thomas fue hallado sin vida en su casa de Gloucestershire después de una serie de hechos que narró para 'Daily Mail', Katy Skerrett, forense principal de Gloucestershire. Según parece, el marido de Gabriella visitó a sus padres, Martin y Jill Kingston, en Cotswolds el domingo 25 de febrero para almorzar con ellos. Poco después, su padre salió a pasear a sus perros, pero al volver Kingston ya no se encontraba en la casa.
Tras 30 minutos sin señales del joven, sus progenitores decidieron ir a buscarlo. Fue su padre quien lo halló, entrando a la fuerza en un edificio cerrado. Al encontrar a su hijo malherido, llamó a los servicios de emergencia. No obstante, estos no pudieron hacer nada por la vida de Thomas salvo certificar su fallecimiento.
Las primeras investigaciones no señalaban que pudiera haber pasado nada fuera de lugar, pero a medida que avanzaba el caso, se fueron conociendo más detalles. La citada publicación aseguró en su momento que, según datos de la investigación, Kingston falleció por una "herida traumática en la cabeza" que podría haber sido provocada por la arma que se encontró cerca de su cuerpo.