Irene de Grecia visiblemente deteriorada: Preocupación por su salud de tras su última aparición junto a la reina Sofía

La última aparición de Irene de Grecia junto a la reina Sofía el Teatro Real ha dejado ver el deterioro de la hermana de la emérita

Adrián López
Adrián López

Redactor digital de Lecturas

Irene de Grecia
GTRES

Si hay una cita a la que la reina Sofía (86 años) nunca falla es el acto de los premios BMW. Un evento al que ni siquiera en la pandemia, uno de los momentos más duros de la historia de todo el mundo y siendo una persona de riesgo por su edad, quiso faltar. Junto a ella en numerosas ocasiones le ha acompañado su hermana Irene (82 años), a la que cuida y protege desde hace años por su delicado estado de salud. 

Fue la revista Lecturas la que hace unos meses dio a conocer el grave deterioro coginitivo que sufre la tía de Felipe desde hace años. Una enfermedad que afecta a su memoria, que poco a poco va destruyendo sus recuerdos y que se suma a estas últimas imágenes en las Irene aparece muy alicaída, con la mirada perdida y con un aspecto físico que lejos deja a la imagen desenfadada y sonriente que todos tienen de la tía ‘Pecu’, como la llama la familia cariñosamente. 

Durante la celebración Irene ha estado en el palco del Teatro Real junto al CEO de BMW, Manuel Terroba, y la secretaria de Estado de Igualdad, Aina Calvo, pero no en la mesa presidencial cuando Sofía estaba inaugurando el acto. Y es que al tratarse de una acto oficial de Casa Real, por protocolo no podía estar. Recordemos que solamente Felipe, Letizia, Leonor, Sofía y la emérita forman parte de este núcleo de la institución. 

Eso sí, durante todo momento la abuela de la futura heredera al trono de España ha estado sin quitarle el ojo a Irene. Siempre está muy pendiente de ella y los gestos de cariño y atención son visibles y numerosos, pero desde hace meses lo son todavía más. Parece que la emérita tiene claro que el deterioro de su hermana es cada día mayor. 

Sofía e Irene de Grecia

Sofía, muy pendiente de Irene Grecia. 

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La ovación a Irene en el Teatro Real 

Para sorpresa de la madre de Felipe y de su hermana, la organización del evento tenía una sorpresa preparada para Irene, a la que han alabado y aplaudido por su faceta más solidaria. Y es que ha estado al frente ONG Mundo Armonía, constituida hace casi cuarenta años para procurar "el bienestar moral, espiritual y material de todos los seres vivos", hasta el pasado enero cuando decidió poner punto y final a la actividad de su fundación benéfica.

De hecho, fue Sofía la que comunicó ya hace más de un año que su hermana debía dejar de estar al frente de la organización a través de un comunicado: "Queridos amigos. Después de un período de 37 años, las actividades de Mundo en Armonía cesarán a finales de 2023. Nuestra organización dejará de funcionar después del 31 de diciembre. Gracias por su solidaridad y apoyo, y por todos estos años de amistad y cooperación. Siempre estaremos agradecidos. Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo 2024", 

Por toda su labor y por confiar siempre en que un mundo mejor es posible, todos los presentes en el Teatro Real, un total de 1300 invitados a la gala, han aplaudido durante varios minutos a Irene, que no daba crédito a lo que estaba sucediendo. Sin duda un momento muy emotivo que la ha convertido en una de las protagonistas de la velada. 

Sofía, que ha vestido espectacular para estos premios, tiene muy claro que ahora es ella la que tiene que estar apoyando a su hermana, con quien siempre ha tenido una buenísima relación. Pero fue en 2002 cuando la suegra de Letizia supo que todavía necesitaba ponerle más atención después del cáncer de mama que padeció y por el que tuvo que someterse a varias sesiones de quimioterapia. Desde entonces su salud ha ido poco a poco empeorando y este verano saltaron todas las alarmas cuando hizo su primera aparición en en silla de ruedas. Una imagen que dejó a todos muy preocupados. Por suerte, tras el fallecimiento de la reina Federica de Grecia, Irene se trasladó a Zarzuela, donde la emérita la puede tener más controlada. Y es que lo cierto es que no se separa da ella casi en ningún momento.