Conscientes de que la princesa Leonor sería la gran ausente de la jornada, todas las miradas estaban puestas en la infanta Sofía. La hija pequeña de los Reyes llegaba a la Plaza de Lima en solitario tras el coche de sus padres. Mientras don Felipe se adelantaba a saludar a las autoridades, doña Letizia esperaba rezagada a su hija a modo de apoyo.
Este ha sido, sin duda, la jornada más solitaria de la infanta Sofía que se enfrentaba, por primera vez, a un acto de enorme relevancia sin la compañía de la princesa Leonor. Además, la joven ha sufrido un cambio de registro inesperado. Por protocolo, es el heredero al trono quien se sitúa al lado derecho del Rey, una posición que ante la falta de la princesa de Asturias ha ocupado su hermana.
Sofía, en solitario, en el Día de la Hispanidad
La ausencia de Leonor ha llevado a Sofía a "usurpar" su lugar al lado de don Felipe. Eso sí, si comparamos la ubicación de la hija pequeña de los Reyes con la de su hermana en años anteriores observamos una ligera diferencia. Aunque la joven, de 14 años, se ha situado junto a su padre a lo largo de todo el desfile lo ha hecho un paso por detrás de lo que lo hubiera hecho su hermana mayor. Por protocolo o no, queda patente que se sigue guardando ese "lugar" solo apto para los herederos. Sea como fuere, lo que queda más que evidente es que Sofía ha aprobado con nota este primer acto oficial sin Leonor.
Será el próximo 22 de octubre cuando Leonor reaparezca públicamente en los Premios Princesa de Asturias y así, Sofía recupere ese apoyo incondicional que tanto echa en falta desde que la primogénita de los Reyes puso rumbo a Gales el pasado mes de agosto.