No se la esperaba, pero la infanta Cristina (58 años) llegaba esta mañana en Barcelona. Una visita inesperada, pero con una razón de peso: estar al lado de su hijo, Pablo Urdangarin, el día que cumple 23 años. Ha sido la revista 'Vanitatis' quien ha desvelado el cambio de planes de última hora de la hermana del rey Felipe VI (55 años). Al parecer, esta decisión se ha debido, a su vez, por un imprevisto por parte de Pablo.
El joven tenía pensado pasar pasar su día con su novia, Johanna Zott. Sin embargo, la joven, que estudia en la universidad de Múnich con una beca Erasmus desde este octubre, no pudo llegar a tiempo para la celebración "por motivos ajenos a ella" , según informa el mencionado medio de fuentes cercanas a la familia. Al enterarse de esto, la hermana de la infanta Elena no dudaba un instante en coger un avión y plantarse en la Ciudad Condal.
Tal como recoge 'Vanitatis', aunque no es seguro la infanta podría haber venido acompañada por su hija pequeña, Irene. Después de celebrar este cumpleaños, la expareja de Iñaki Urdangarin aprovechará la visita para acudir al partido de su hijo este viernes, tal como recoge el citado medio. El Franklin Granollers, el equipo de Pablo, competirá contra el Genil de Córdoba, un evento que probablemente reúna a la infanta con varios amigos, así como los padres de Johanna Zott y ella misma, tal como
El gran momento de Pablo Urdangarin a sus 23 años
Pablo Urdangarin no lo ha tenido fácil. En sus 23 años de vida ha experimentado algunas situaciones muy complicadas. Cuando era pequeño, sufrió bullying en el colegio y de más mayor vio como sus mediáticos padres se sentaban en el banquillo y como uno de ellos entraba en prisión. Más recientemente, vivió el exilió de su abuelo a Abu Dabi y hace dos años la separación de sus progenitores, a la vez que se descubría la nueva relación de su padre con Ainhoa Armentia.
Sin embargo, a pesar de todo esto, Pablo no ha parado de cosechar éxitos. Se ha esforzado muy duro para ser un gran balonmanista y jugar en el equipo que más le interesa, a la vez que sacaba tiempo para pasar con sus hermanos, como el viaje a Suiza para la graduación de su hermana. Y no solo eso, sino que también ha tenido tiempo para establecer una relación sólida y apasionada con Johanna Zott. Cada ocasión es buena para verse y, cuando están juntos, no pueden evitar mostrar su amor con besos y arrumacos que demuestran el momento tan dulce en que se encuentran. Además, se ha alzado como el más educado y hablador de la familia real, ya que nunca ha tenido problema en contestar a los medios con cordialidad y simpatia.
La infanta Cristina, molesta con Iñaki Urdangarin
La infanta Cristina se ha volcado absolutamente en sus hijos y en su vocación profesional. En parte porque es aquello que la llena y la hace feliz, pero por otro lado es una forma de marcar distancia con el divorcio con Iñaki Urdangarin. Tras esperar a que su hija, Irene, cumpliera la mayoría de edad, Cristina e Iñaki habrían iniciado el proceso para separarse formalmente con acuerdo económico de por medio.
Esta decisión aunque aceptada por ambos, habría sido muy difícil para la infanta Cristina. Y es que a pesar de esta separación, la hija del rey Juan Carlos no ha dejado de usar su alianza. Algo que podría indicar los sentimientos que aún tendría por el padre de sus hijos y por los que las últimas fotos de Iñaki con el hijo de su novia no deben haberle hecho mucha gracia.
Era Pilar Eyre, escritora y bloguera de Lecturas, la que informaba de que la cuñada de Letizia (51 años) sufriría cada vez que aparecen nuevas imágenes del exdeportista con su nueva pareja. Tanto es así, que Cristina no querría que sus hijos conocieran a Armentia, a la que culpa de su ruptura con Urdangarin. Ante el malestar de su madre, Juan, Pablo, Miguel e Irene se habrían negado a conocer aún a Ainhoa.