Este viernes se han celebrado los Premios Princesa de Asturias, unos galardones que toda la familia real espera con mucho deseo por diferentes motivos. Este año el protagonismo estaba cedido en gran medida a la princesa Leonor (18 años). Sin embargo, ha habido otros momentos que han captado la atención de todos los telespectadores, las típicas anécdotas que aparecen en los momentos de mayor nerviosismo pero también en los ambientes más relajados.
La emoción de las abuelas de la princesa Leonor
Con el paso de los años la madurez de la hija mayor de la reina Letizia (52 años) se va demostrando. Además, cada aparición suya supone un avance en la soltura que tiene a la hora de enfrentarse a este tipo de situaciones. No obstante, pese a que cada vez es más habitual verla en esta tesitura, la realización del discurso en los premios que llevan su nombre ha provocado la emoción de sus dos abuelas que se encontraban presentes.
La reina Sofía es consciente de todo lo que supone la implicación institucional de su nieta. Por ello, no ha podido evitar emocionarse al ver los pasos agigantados que está realizando en su camino como heredera a la Corona española. Pero su otra abuela no se ha quedado atrás. Paloma Rocasolano llegaba al Teatro Campoamor con un elegante vestido que ha sido de lo más comentado. Sin embargo, durante el discurso de su nieta hemos podido verla al borde del llanto.
El guiño de la reina Letizia con Paloma Rocasolano y los cuchicheos con la reina Sofía
Cuando los monarcas y sus hijas han hecho su entrada en el teatro asturiano, Letizia no ha podido evitar pararse ante su madre. Las dos han hecho gala de su unión y han permanecido un rato hablando ante la atenta mirada de todos los presentes. Este gesto denota la buena relación familiar que tiene y el apoyo también en un momento en el que Paloma no está acostumbrada a ser el foco de atención pero su hija ha querido calmarla con esta charla.
Pero no ha sido el único gesto que la monarca ha querido tener con su familia. También ha hecho lo propio con la reina Sofía. En la actualidad no está atravesando uno de sus mejores momentos, ya que los famoso audios del rey emérito Juan Carlos la han puesto en el disparadero. Sin embargo, la mujer del rey Felipe VI ha querido demostrar que está de su lado, ya que ha estado cuchicheando con su suegra. De hecho, esta situación demuestra que se trata de una familia completamente normal, donde la unión y la complicidad ha estado más que patente en este momento.
La gran complicidad y el orgullo de la familia real
Como anécdotas destacadas se puede mencionar también la temprana llegada que ha tenido Paloma Rocasolano. La madre de la reina Letizia ha llegado 45 minutos antes de lo previsto, algo que no suele ser habitual en este tipo de ceremonias. No obstante, la emoción por poder ver a su nieta en el discurso ha provocado que sea de las primeras en aparecer por la alfombra azul del teatro.
No obstante, se tratan de los primeros premios en los que Leonor es mayor de edad, ya que el año pasado la heredera estaba a punto de cumplir la mayoría de edad. Por otra parte, también se ha mencionado el gesto que ha tenido Letizia con su suegra, donde le cedía el paso con su mano. Además, la Princesa de Asturias también le ha pedido amablemente a la reina Sofía que dejase de saludar a todo el público, ya que la estaban esperando para hacerse la típica fotografía de toda la familia real a las puertas del teatro.
Pero si hay gestos que siempre aparecen son los que demuestran la complicidad entre las dos hermanas. La infanta Sofía es consciente de su papel secundario en este tipo de eventos. Pero su hermana mayor no está dispuesta a que esto sea así y siempre se muestra muy atenta con ella. De hecho, ha habido varios momentos en los que sus miradas se cruzaban e incluso han podido soltar algunas risas en su camino hacia el palco del teatro.
Otro detalle que ha llamado especialmente la atención es el orgullo que han mostrado los Reyes de España con su hija mayor. Mientras la heredera estaba realizando su emotivo discurso, hemos podido ver a una Letizia muy relajada, algo poco habitual en ella en este tipo de situaciones. A Letizia le gusta tenerlo todo bajo control y la tensión se aprecia en ella en estas circunstancias, sobre todo cuando se trata de un aspecto relacionado con sus hijas. Sin embargo, esta tranquilidad demuestra la confianza que tiene depositada en su hija mayor, consciente de las tablas que ha ido adquiriendo durante su última etapa de mayor protagonismo en los deberes reales.
Por último, ha habido un gesto por parte del rey Felipe VI que ha conmovido a todos los presentes. Al tratarse de esta primera ocasión en la que Leonor es mayor de edad se ha procedido a un nuevo paso generacional en los premios que llevan su nombre. “Por eso, permítanme que comparta con ustedes un pensamiento íntimo: Entenderán que les diga que veo con emoción -de Rey y de padre-, que Leonor, como Presidenta de Honor que es de la Fundación, se encargue de hacerlo a partir de ahora, como acabamos de ver hace un instante”, explicaba el monarca sobre el papel de la heredera a partir de ahora a la hora de expresar el discurso.