El verano es sinónimo de vacaciones y aunque Kate Middleton (41 años) y la reina Letizia (50 años) siguen haciendo frente a sus compromisos profesionales, otras como Mary de Dinamarca, Mette-Marit de Noruega o Máxima de Holanda ya han dado comienzo a estas semanas de asueto lejos de miradas indiscretas.
Las de Máxima y Guillermo de Holanda son las vacaciones más largas. El matrimonio real se despedía el pasado 1 de julio y no está previsto que retomen sus obligaciones institucionales hasta el 31 de agosto. Antes de esto, la familia real al completo protagonizaba su tradicional posado de verano, imágenes captadas desde la playa de la Haya donde mostraron su faceta más natural y divertida. Un posado que esconde tras de sí un acuerdo con los medios de comunicación del país.
Tal y como ha trascendido, los reyes tienen un acuerdo con la prensa local. A cambio de un posado y algunas declaraciones, los medios respetarán las vacaciones privadas de la familia real, evitando así imágenes de carácter íntimo durante sus días de asueto. Aunque es conocido por todos que Máxima, Guillermo, Amalia, Alexia y Ariane se trasladarán a la mansión que poseen en Grecia, no habrá imágenes de ellos, lo que les permitirá disfrutar de la isla como un grupo de turistas más.
Una mansión con vistas al mar Egeo valorada en 4,5 millones de euros
Fue en 2012 cuando Guillermo y Máxima adquirieron una mansión en la isla de Spetses (Grecia) por un precio de 4,5 millones de euros, un destino paradisíaco de aguas turquesas y acantilados con vistas al mar Egeo que se ha convertido en su refugio cada verano.
Dividida en tres grandes casas de fachada blanca, para mantener la estética de la isla, además de habitaciones y baños con todo lujo de comodidades, dispone de piscina, pista de tenis y puerto privado para facilitar la entrada y salida por mar.
Máxima de Holanda hace un parón en sus vacaciones para irse de boda
La Reina de Holanda y su hija Amalia eran invitadas a la boda del príncipe Ferdinand zu Schwarzenberg y Marie Friling, un multitudinario enlace de carácter real que tuvo lugar el pasado fin de semana en Attersee (Austria). Aunque no existen fotos oficiales, madre e hija fueron captadas por los curiosos y las imágenes no tardaban en hacerse virales en redes sociales, lo que nos permitió ver qué looks eligieron para la ocasión.
Mientras que la princesa heredera recurría al vestido rojo que estrenó para la reciente boda de Hussein de Jordania, un diseño de Jan Taminiau colmado de encaje y tul, Máxima optó por un diseño de escote corazón y bordados en color champán, modelo que completó con un chal al tono y una discreta tiara y collar de perlas.