“Estuvo dos horas": la rocambolesca historia del rey Juan Carlos y Antonia Dell'Atte a bordo del Fortuna

La historia del rey Juan Carlos tiene un punto clave en Palma de Mallorca, el lugar donde frecuentaba amistades de todo tipo a espaldas (o no) de la reina Sofía

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Rey Juan Carlos
GTRES

“Estuvo dos horas, salió, se le hicieron fotos y nunca vieron la luz”. Hay que remontarse a los veranos donde la Familia Real al completo mitigaba el calor en Palma de Mallorca. Hasta el palacio de Marivent se trasladaban los reyes Juan Carlos y Sofía y sus tres hijos. Eran semanas de posados, de salidas al mar y visitas familiares. O al menos esa es la imagen que se trasladaba a los ciudadanos. La realidad estaba algo más alejada. Mientras la reina hoy emérita se dedicaba al cuidado de sus hijos, el rey Juan Carlos aprovechaba el descanso para encontrarse con otras amistades.

En el círculo mallorquín de Juan Carlos se encontraba Marta Gayá. Su historia ha sido mil veces contada. El hoy emérito no escondía su relación con la empresaria. No lo hacía incluso cuando estaba su mujer presente. Pero no era esta la única que pasaba instantes con el rey en los cálidos veranos de Mallorca. Otras amistades, menos conocidas por el público, también se encontraban en ese archivo casi infinito que rodea al monarca.

Uno de sus episodios más comentados tiene como protagonista a una conocida modelo, al entonces jefe de la Casa del Rey y un complot que podría haberse orquestado para escarmentar al propio monarca. Dentro de Zarzuela había inquietud por sus correrías cada vez menos secretas y más comentadas. Parece que ese fue el detonante para que se crearse una 'trampa' con la que prevenir al monarca.

Un encuentro a bordo del Fortuna

El rey Juan Carlos me consta que estaba en ese barco. No sé qué pasó, lo desconozco y no me importa... Pero nosotros, los paparazzi, realizamos imágenes de cómo subía y bajaba. Juan Carlos estaba en el barco. Realizamos las fotografías desde muy lejos para que no fueran conscientes”. Habla la periodista Lorena Vázquez. Cuenta el testimonio en el programa ‘Espejo público’. “Yo en primera persona presencié una posible portada que desaparece”.

Era habitual que en ese momento el rey Juan Carlos pasara mucho tiempo abordo del Fortuna. Era el yate oficial del monarca donde navegaba acompañado de la reina Sofía y de sus hijos. Allí recibía a políticos, representantes de otras Casas Reales y visitas internacionales a las que quería impresionar. No en vano, la vela fue el gran deporte -junto con el esquí- de la Familia Real hasta que llegó la reina Letizia.

“El jefe de la Casa del Rey, Sabino Fernández Campo, le tiende una trampa”, apuntó tiempo antes Juan Luis Galiacho. El periodista, gran conocedor de los entresijos tanto de Zarzuela como del propio rey Juan Carlos, no dudó en referirse a la existencia de estas fotografías captadas por los paparazzis. “Lo hacía para que no se saliera de madre lo de sus amantes”, afirmaba en televisión. Pero, ¿de quién se trataba?

La supuesta protagonista de estas fotografías

Hay imágenes de Antonia Dell'Atte subiéndose al Fortuna en Palma de Mallorca. Se habló de que este fue uno de los grandes enfados de la reina Sofía”, aseguraba Gema López también en 'Espejo público'. No era una historia nueva. Años antes, en ‘Sálvame’, se incidía en este supuesto encuentro entre la italiana y el rey Juan Carlos. “Ven llegar a una mujer y era Antonia, estuvo dos horas, salió, le volvieron a hacer las fotos y nunca vieron la luz”, explicaba Laura Fa en el extinto programa.

La italiana formaba parte de las amistades del rey emérito. No solo por su matrimonio con Alessandro Lequio, primo del hoy emérito, sino sobre todo por la amistad con José Luis de Vilallonga, escritor y biógrafo de Juan Carlos. Antonia sentía un enorme cariño por José Luis. “Fue José Luis de Vilallonga, el biógrafo del rey, quien la introduce en el círculo del monarca. La lleva a su casa de Mallorca y Antonia va a bordo del Fortuna, el barco del rey”, explicó Galiacho según recoge el portal 'Vózpopuli'.

La realidad de estas fotografías parece que es algo complicada. Según se publicó en su momento, sí existen unas fotografías de Antonia Dell'Atte visitando al rey en el yate. De hecho se publicaron. Al parecer, Dell’Atte acudió a una velada en el yate del monarca junto a su hijo Clemente como hacían numerosos amigos del rey durante los meses que pasaba en Palma de Mallorca. Fue entonces, en ese encuentro conocido por todos, cuando se hicieron las fotografías. Esas fueron las que vieron la luz.

La italiana no quiso pronunciarse cuando se comentó este asunto en el programa 'Sálvame'. Antonia ha estado en comidas y veladas con el monarca. Nada extraño pues la italiana, durante un tiempo, fue familia directa del emérito. Todo gracias a su relación con Alessandro Lequio, primo del rey y número 27 en la línea de sucesión a la Corona.

La amistad de Antonia Dell’Atte y el rey Juan Carlos

Entre Antonia Dell’Atte y el rey emérito hubo directamente un parentesco. Hay que tener en cuenta que Alessandro Lequio, pareja de la italiana y padre de su hijo, es familia del emérito. Su madre, Alessandra Torlonia, es prima hermana del rey Juan Carlos, lo que convierte al colaborador en primo segundo del hoy rey Felipe. Alessandro conoce bien las intimidades de la Familia Real y los secretos de Zarzuela.

El propio Alessandro se pronunciaba sobre el rey a raíz de los audios publicados con Bárbara Rey. "Creo que soy el que mejor conoce a Juan Carlos porque ha pasado muchos años en mi casa", explicaba en el programa 'Vamos a ver'. "Él es así. Te seduce con su forma coloquial de hablarte, te hace creer que está haciendo confidencias cuando lo hace con todo el mundo. Lo que hizo con Bárbara Rey es lo que hace normalmente, el éxito del Rey es que te cautiva y te conquista hablando. Te hace creer que eres alguien especial para él, lo hace con todo el mundo".

Ya Pilar Eyre revelaba en su blog de Lecturas un encuentro entre Antonia y el emérito ocurrido cuando la italiana todavía estaba casada con el conde. “En una comida en casa de Alessandro Lequio, le empezó a hablar a doña Sofía de las apariciones de El Escorial, y la reina escuchaba tan arrobada que, al final, don Juan Carlos intervino a gritos desde el otro extremo de la mesa, donde estaba coqueteando con Antonia Dell’Atte (entonces casada con Lequio): “¿Quieres callarte de una puñetera vez? ¿No ves que esa boba se lo cree todo?”.