De la emoción de Mary de Dinamarca al gesto inesperado del rey Federico: las anécdotas del reencuentro con el príncipe Christian

El heredero al trono danés ha comenzado su formación militar en el Regimiento de Guardias de Slagelse, donde le han visitado sus padres

Pablo Sánchez
Pablo Sánchez

Periodista especializado en corazón y actualidad

Christian de Dinamarca
Instagram @detdanskekongehus

Este año está siendo muy especial para el príncipe Christian de Dinamarca (19 años), que hace poco más de un mes comenzaba el servicio militar en el Regimiento de Guardias en Slagelse como parte de la formación del heredero al trono. Esto no es sólo algo que va a marcarle para siempre en su camino hacia la corona del país, también es algo muy emocionante para sus padres, Federico X (56 años) y Mary de Dinamarca (53 años), que han querido ir a ver a su hijo mayor al centro militar donde está realizando esta etapa, mostrándonos una faceta muy cercana y emotiva que no estamos acostumbrados a ver.

El reencuentro entre los reyes de Dinamarca y su hijo Christian

Ha sido a través de la cuenta oficial de Instagram de la Casa Real danesa donde hemos podido ser testigos del reencuentro entre el joven príncipe y sus padres, habiendo estado también presentes en esta visita sus hermanos pequeños, Isabella, Josephine y Vincent, que han querido estar presentes y disfrutar de su hermano de nuevo.

“Las familias de la compañía fueron invitadas hoy a un día de visita en el cuartel de Antvorskov, donde la Familia Real tuvo la oportunidad de experimentar al Príncipe Heredero en su nuevo entorno y conocer al resto de sus co-reclutas. Es una larga tradición que los miembros de la Casa Real sirvan en las Fuerzas Armadas. Su Majestad el Rey ha completado el servicio militar él mismo, y en 1988 el Rey fue, entre otras cosas, un líder de pelotón en el regimiento de guardias”, podíamos leer en este post, donde nos han hecho testigos de los cálidos abrazos entre todos ellos y de la enorme felicidad en sus caras al volver a verse semanas después.

La cercana visita de los reyes al príncipe Christian 

Los monarcas y sus hijos se mostraron muy orgullosos de su primogénito en esta jornada de puertas abiertas a las familias, recorriendo el lugar en compañía de Christian, que les mostró las instalaciones del cuartel, situado a 100 kilómetros de Copenhague y con capacidad para 2000 soldados, que se ha convertido en su nuevo hogar hasta el próximo mes de mayo. Entre las diferentes instalaciones de las que dispone Christian este cuenta con un gran comedor y espacios de recreación en los que puede disfrutar de unas mesas de billar y ping-pong. 

Christian de Dinamarca e Isabella
Instagram @detdanskekongehus

Este les mostró su cuarto, compuesto de dos literales dobles en las que duerme con otros tres compañeros y donde dispone de cuarto de baño privado, ha dejado a su hermana Isabella probarse parte de su uniforme, habiéndola visto luciendo ese casco de camuflaje, y ha explicado a toda la familia detalles como la serie de su rifle.

Christian de Dinamarca
Instagram @detdanskekongehus

Durante esta visita el joven ha llevado en todo momento el uniforme oficial, al igual que sus compañeros de formación, que también pudieron saludar a los reyes daneses.

La gran decisión de Christian de Dinamarca en su formación militar

Christian regresaba de haber estado trabajando en una granja en Tanzania, en África Oriental, justo antes de comenzar esta etapa, ante la que tomo una firme y muy comentada decisión. El hijo de los reyes rechazaba el salario que le correspondería como recluta, exactamente decía que no a un sueldo de 9.000 coronas danesas, aproximadamente 1.200 euros al mes. Estos además reciben unos 35 euros extra libres de impuestos para gastar en comidas.

Esto es algo que no es la primera vez que vemos hacer al heredero al trono de un país europeo, siendo una decisión que también tomó la princesa Leonor, rechazando su sueldo de soldado, que constaba de 417 euros al mes.

De esta nueva etapa hablaba el jefe de Estado Mayor, Lasse Galsgaard-Olsen, a 'Billed Bladet', comentando que "el primer día hará el registro y después se le dará la equipación necesaria. Un uniforme, botas, mochilas y chaleco. Lo deberá llevar en todos los entrenamientos militares", a lo que añadió que "por supuesto, puedes tener malas experiencias a lo largo del camino. Pero cuando vuelvan a casa serán jóvenes que se van a llevar algo más. Ya sea por su perspectiva de desarrollo personal, porque sales de tu propia burbuja. Entran en un contexto diferente. Aprenden. Esta formación les da herramientas para seguir adelante. También es importante el desarrollo personal y las habilidades que obtienen. Se incluye los primeros auxilios y una mejor condición física". Esta etapa es especialmente bonita para su padre, que también llevó a cabo su formación militar en el Regimiento de Húsares de la Guardia, aunque en su caso la llevó a cabo en otro lugar.