Como cada año, la familia real británica (casi) al completo se ha dado cita en la tradicional misa de Navidad en Sandringham, una cita marcada en rojo en la agenda de los Windsor y que ha contado con Harry y Meghan como los grandes y únicos ausentes.
Envueltos en una gran expectación, Carlos y Camilla iniciaban el desfile desde el castillo hasta la iglesia de Santa María. Tras ellos, Guillermo y Kate con sus tres hijos, la princesa Ana con su familia, Eduardo y Sophie, duques de Edimburgo, las princesas Eugenia y Beatriz con sus respectivos maridos, así como el príncipe Andrés, quien fue apartado de las obligaciones institucionales hace años tras verse salpicado por el caso Epstein. Lo que nadie esperaba es que a todos ellos se uniera Sarah Ferguson, 30 años después de su mediática separación de Andrés.
A lo largo de toda la velada, todos los miembros de la familia real han presumido de gran complicidad, aunque los más pequeños han sido los que han acaparado todo el protagonismo gracias a sus travesuras.
Kate y Guillermo con sus hijos celebran la Navidad en Sandringham
Botas y maxi abrigo azul: Kate Middleton, reina de la elegancia en Sandringham
Como en cada aparición pública que se precie, Kate Middleton ha vuelto a acaparar todo el protagonismo. Elegante a la par que impecable, la princesa de Gales se ha decantado por un total look azul protagonizado por un abrigo entallado con hombreras marcadas, bolsillos con solapas y cintura remarcada con una favorecedora costura. Debajo se dejaba entrever un vestido de punto de cuello cisne que combinaba con unas botas de ante y tocado a juego.
Radiante y visiblemente feliz, Kate elevaba su look invernal con imponentes joyas: pendientes de diamantes y zafiros a juego con su icónico anillo de compromiso.
Louis y Charlotte, grandes protagonistas de la Navidad de los Windsor
Con permiso de George, quien a sus 10 años, ya preside cada acto con suma madurez a pesar de su corta edad, sus hermanos Charlotte y Louis han acaparado buena parte del protagonismo de esta velada familia que ha reunido a (casi) toda la familia Windsor en Sandringham.
Una coqueta Charlotte (8 años) ha estrenado abrigo made in Spain. Convertida en una auténtico icono de estilo mini, la hija de Kate Middleton es, sin duda, la mejor heredera de su madre, y para la ocasión optó por una pieza verde oliva de doble botonadura que pertenece a la nueva colección de la firma 'Friki'. A su lado, y siembre bajo la atenta mirada de su madre, el pequeño Louis (5 años), quien no dejaba de protagonizar divertidas muecas y se intentaba liberar de su madre sin éxito, ya que Kate no le dejó solo ni un instante.