En sus años de reinado, los reyes Felipe VI (56 años) y Letizia (52 años) han hecho frente a eventos de todo tipo. No obstante, hay actos que son más difíciles que otros. El 80 aniversario de la liberación del campo de concentración y exterminio Auschwitz-Birkenau. Las autoridades de Polonia han organizado un solemne homenaje a las puertas de este espacio, en el que líderes de toda Europa han acudido para recordar este momento oscuro de nuestra historia y recordar los testimonios de algunos de los supervivientes del holocausto.
Los monarcas españoles han llegado junto a sus tocayos holandeses, Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda, y se han asentado en sus lugares asignados. Con el resto serio y en un riguroso luto, los padres de la princesa Leonor han mostrado su total conmoción por los hechos que se estaban recordando durante este acto.
Además de su actitud afectada ha habido otro detalle que ha llamado la atención de Letizia. A diferencia de las otras royals europeas, la reina ha marcado la diferencia con dos decisiones. El primero es que la madre de la infanta Sofía se ha decantado por unos pantalones rectos para la ocasión.
Tanto Máxima de Holanda, Matilde de Bélgica y Mary de Dinamarca han optado por faldas y vestidos para esta ocasión. Una prenda que la reina no habría querido elegir, quizá para dar un tono aún más grave a los hechos que se homenajean hoy.
El otro elemento tiene que ver con su cabello. De nuevo, sus tocayas europeas han usado tocados para adornar sus cabelleras. Incluso Amalia de Holanda ha aparecido por sorpresa con un tocado que contaba con una ligera rejilla que le tapaba parte de la cara. En cambio, Letizia ha decidido ir con el pelo suelto, sin ningún accesorio que pudiera desviar la atención hacia ello.
El cambio que ha mostrado la reina Letizia en sus años de reinado
Esta diferencia que ha marcado con las otras royals en Polonia es una muestra del gran cambio que ha manifestado la reina Letizia en sus 10 años de reinado. Y es que este no es el único momento en que la monarca ha demostrado ser distinta a los otros miembros de la realeza. Por ejemplo, la semana pasada, no dudaba en leer un cuento a un grupo de niños y niñas pequeños. Un gesto espontáneo y natural que no muchas de sus tocayas harían.
Además, no duda en dar discursos cuando es procedente y en mostrar su total compromiso con las causas que lidera. Sobre esta actitud tan llamativa, María Manjavacas, experta en Casa Real de la Cadena Ser, no dudaba en realzar el papel de la Reina. "Su figura es de agradecer. Ella dinamiza una institución como la monarquía con su naturalidad y espontaneidad", ha señalado sobre la madre de la princesa Leonor.
"Esa cercanía la ha cultivado cuando era reportera y estaba a pie de calle. Y la Casa Real ha ganado mucho teniéndola a ella", elogiaba, destacando el valor que ha aportado Letizia. Eso sí, no ha sido un camino fácil, ya que al principio estaba "desbordaba y estaba constreñida". Pero, tras un período de adaptación, la experiencia de Letizia como reportera ha salido a la luz. "Está tan ubicada y segura de sí misma...", afirmaba,
De Mary de Dinamarca a Máxima de Holanda, cumbre de royals en Polonia
Los hechos que se han conmemorado este lunes en Polonia son un recuerdo para todos los países europeos de una parte muy complicada de su historia. Es por eso que casi todos los representantes de las casas reales de Europa han acudido a esta cita. Mary y Federico de Dinamarca han sido unos de los primeros en llegar y han compartido varios cuchicheos durante la ceremonia.
Máxima, Guillermo Alejandro y Amalia de Holanda aterrizaban en Polonia con un vuelo privado. La princesa sorprendía al acudir por sorpresa a este evento, demostrando su total implicación en sus compromisos como futura reina. Por otro lado, el rey Carlos III participaba en este evento en solitario, ya que la reina Camila ha permanecido en Reino Unido. Además, ha protagonizado un momento curioso al quedarse dormido durante parte de la ceremonia. Aunque se ha despertado rápidamente, las cámaras han captado este momento.
No ha sido la única ausencia. Mette-Marit de Noruega tampoco ha acompañado a su marido, el príncipe Hakoon, a este evento. No es de extrañar. La princesa lleva varios meses en el centro del foco mediático por las polémicas que ha protagonizado su primogénito, Marius Borg. Una denuncia por agresión a una exnovia, drogas o una segunda acusación por violación han afectado directamente al joven.
Las anécdotas que han marcado el 80 aniversario de la liberación de Auschwitz -Birkenau
Como es inevitable con tantas personas en un acto, las anécdotas han proliferado. Algunas de ellas han sido pequeños gestos casi inadvertidos, como los cuchicheos constantes entre Mary y Federico de Dinamarca o como han separado a Máxima y Guillermo de Holanda de su hija, Amalia, que ha aparecido por sorpresa en Polonia. No sería de extrañar que su presencia sea una forma de empezar a darle peso a su figura, ya que en algún momento ocupara el trono de los Países Bajos.
Otro más llamativo han sido los dos momentos contrapuestos de Carlos III. Al principio de la ceremonia, el monarca británico se ha emocionado al escuchar algunos de los testimonios, dejando escapar algunas lágrimas. En cambio, minutos más tarde, el marido de Camilla se quedaba dormido durante unos segundos. Aunque se despertaba casi al instante y lo disimulaba con gran habilidad, las cámaras han captado este momento.
En cuanto a nuestros reyes, Letizia ha protagonizado un pequeño lapsus. Al entregar dos velas en señal de respeto por los asesinados, los monarcas se han puesto de acuerdo y han agachado la cabeza a la vez antes de colocarla. Sin embargo, una vez hecho, la reina ha vuelto a hacer una pequeña reverencia, mientras que Felipe ha empezado a retirarse. Apenas unos momentos en los que ambos parecían chocar frente a las cámaras.