Ha sido el rey Harald de Noruega el primero en reaccionar ante de la crisis sanitaria mundial provocada por el covid-19, emitiendo este domingo un comunicado dirigido a sus ciudadanos. En su mensaje, que se transmitía por televisión, pedía responsabilidad social y tranquilidad para afrontar la complicada situación, y aprovechaba para agradecer el trabajo de los profesionales sanitarios.
Tras su estela, este lunes los jefes de Estado de los países que forman el Benelux coincidían emitiendo sus mensajes públicos. Tanto Felipe de Bélgica como el gran duque Enrique de Luxemburgo grababan sus discursos para su emisión posterior a través de todos los canales disponibles. Por su parte, Guillermo de Holanda lo lanzaba por las redes sociales de la Casa Real de los Países Bajos. Además, Margarita de Dinamarca y Carlos Gustavo de Suecia se han sumado a la iniciativa esta misma semana. El último en hacerlo ha sido el rey Felipe II, quien el pasado miércoles 18 de marzo mandaba un claro mensaje a toda la nación.
El Rey se dirigía a toda la nación por segunda vez durante todo su reinado e intentaba mandar un mensaje positivo. “Este virus no nos vencerá. Al contrario. Nos va a hacer más fuertes como sociedad; una sociedad más comprometida, más solidaria, más unida. Una sociedad más comprometida, más solidaria, más unida. Una sociedad en pie frente a cualquier adversidad”, aseguraba Felipe VI ante un atril y de pie, en una puesta en escena hasta ahora inédita hasta ahora.
“A lo largo de los años hemos pasado por situaciones muy difíciles, muy graves; pero, como las anteriores, esta también la superaremos. Porque España es un gran país; un gran pueblo que no se rinde ante las dificultades”, ha asegurado el monarca, quien en todo momento ha mantenido un mensaje muy positivo.
“Debemos dejar de lado nuestras diferencias. Debemos unirnos en torno a un mismo objetivo: superar esta grave situación. Y tenemos que hacerlo juntos; entre todos; con serenidad y confianza, pero también con decisión y energía”, ha pedido Felipe VI.
El Rey ha mandado un mensaje de agradecimiento a todos los sanitarios: "A ellos quiero dirigirme ahora: tenéis nuestra mayor admiración y respeto, nuestro total apoyo. Sois la vanguardia de España en la lucha contra esta enfermedad, sois nuestra primera línea de defensa. Los que todos los días y a todas las horas del día, estáis cuidando a los afectados, curando a los enfermos, dando consuelo y esperanza a los que lo necesitan".
Tras calificar de “muy traumática” la forma en la que el COVID-19 ha alternado las vidas de todos los españoles, el monarca ha mandado un mensaje a todos los que han sufrido pérdidas. “Cariño y afecto a tantas familias en toda España que desgraciadamente han sufrido la pérdida de alguno de sus seres queridos. También lo hacemos a todos los que estáis especialmente afectados, tanto en lo personal en vuestro entorno, por este virus y sus consecuencias. A todos vosotros, mucha fuerza y mucho ánimo”, ha asegurado.
El mensaje del resto de reyes de Europa
Con los reyes holandeses en cuarentena por un posible contagio en su reciente viaje de Estado por Indonesia, podría decirse que es la Familia Real que más está sufriendo las consecuencias del covid-19, a la espera de los resultados de sus pruebas. Sin embargo, este estado de "aislamiento" voluntario también lo están llevando a cabo el Rey Harald y su esposa Sonia, su nuera Mette-Marit -por ser persona incluida dentro de los grupos de riesgo- así como la reina Isabel II de Inglaterra.
Sin embargo, es el soberano de los belgas el que se enfrenta a una complicada situación: su hija la princesa heredera Elisabeth se ha tenido que quedar en Gales, por lo que permanecerá confinada en el internado donde realiza el último curso de bachillerato, lejos de su familia. La joven, ateniéndose a las medidas preventivas para evitar la propagación del virus, ha optado por permanecer en el que es su lugar actual de residencia.
Por su parte, el Gran Duque enviaba un mensaje de apoyo y concienciación a sus ciudadanos. "Me dirijo a ustedes hoy en un momento en que la vida en Luxemburgo tuvo que ser sacudida", comenzaba. "Es el momento en que se requiere nuestra solidaridad nacional y hago un llamamiento a todos para que tomen la situación en serio y sigan también las medidas y recomendaciones. Sabemos que el virus que actualmente está paralizando el mundo puede ser muy peligroso para las personas vulnerables. Es esencial que logremos limitar la propagación del coronavirus y, en particular, asegurarnos de que la mayor cantidad posible de personas puedan infectarse ala vez".
Message de Son Altesse Royale le Grand-Duc au sujet de la pandémie de COVID-19 from Cour grand-ducale de Luxembourg on Vimeo.
Enrique de Luxemburgo concluía sus palabras expresando su más profundo respeto al Gobierno y a las diversas autoridades que trabajan por el bienestar del país, además de "agradecerles por su valioso e incansable trabajo". Además, destacaba "la solidaridad en la población y las muchas iniciativas que se han formado espontáneamente para ayudarse mutuamente, y especialmente para proteger a las personas más vulnerables".
La reina Margarita de Dinamarca lanzaba un duro mensaje a través de redes sociales este martes. En sus palabras, la soberana advertía de que el virus es "peligroso, y que se extiende rápidamente" además de hacerse más fuerte.
"Una persona puede infectar a muchos, incluso sin sentirse enferma, y la infección continúa con una cadena larga y aterradora. En esa cadena, los humanos morirán. Un niño puede perder a su abuela, una hija, a su padre, una esposa, a su esposo. Los amigos de repente ya no estarán allí. Es la cadena que debemos romper y que podemos romper. Solo puede suceder cuando todos pensamos y hacemos lo mismo al mismo tiempo, y en el momento adecuado", advierte la monarca de los daneses. "El consejo de las autoridades es bastante simple: lavarse las manos. Mantén tu distancia. Evitar el contacto físico. Quédate en casa", concluye.
Uno de los últimos en sumarse a la iniciativa propulsada por Harald de Noruega ha sido el rey Carlos Gustavo de Suecia. "Está en nuestra capacidad asumir la responsabilidad de manera conjunta a medida que se demuestra nuestra fortaleza. Cada vez que esto sucede, cada vez que elegimos mostrar consideración y empatía, ayudamos a mantener lo mejor de Suecia, por el bien de Suecia", asegura el monarca.
El pasado martes 17 de marzo la Corona se unía a un consulado de información adicional en el Palacio Real con motivo de la propagación del virus. Una reunión excepcional en la que el soberano ha aprovechado para enviar otro mensaje y pedir "seriedad" a la hora de ser responsables con las medidas sanitarias preventivas. Además, aprovechaba para enviar unas palabras más positivas con el fin de apoyar a sus ciudadanos: "Las situaciones difíciles, como en la que estamos ahora, también ofrecen una oportunidad; La oportunidad de sacar lo mejor de nosotros mismos. Como país y como seres humanos. Hay buenas razones para sentir esperanza y confianza".
Carlos Gustavo informaba también de los cambios que sufrirá el país. "El gobierno ha tomado una serie de medidas. El Parlamento está preparando una serie de nuevas leyes. Los empleados y voluntarios trabajan a propósito para limitar la propagación del virus, obtener información precisa y ayudar a los afectados. En el sector empresarial, también se toman buenas iniciativas para apoyar y contribuir. Estos esfuerzos merecen nuestro aprecio y respeto. Al mismo tiempo, millones de suecos asumen una gran responsabilidad: Se abstiene de actividades e interacciones que ha estado esperando. Cambias tu vida diaria y tus planes. Y esto se hace no solo por su propio bien, sino por el bien de sus semejantes. Para no propagar la infección".
También se ha sumado a los mensajes Isabel II, una de las más tardías, y lo ha hecho a golpe de comunicado a través de sus redes sociales. En la publicación cuenta que su marido Felipe de Edimburgo y ella han llegado hoy a Windsor, donde van a pasar la cuarentena. A través del texto anima a los ciudadanos a que se sumen a la responsabilidad y desea que lleven el cambio de rutina lo mejor posible.