Ha sido una de las imágenes de la jornada. Por primera vez en 59 años, la reina Isabel II se ha ausentado “a regañadientes” del solemne acto con motivo de la tradicional apertura del Parlamento británico debido a sus problemas de movilidad. Por ello, los príncipes Carlos y Guillermo se han visto obligados a dar un paso al frente en el que han estado acompañados por Camilla de Cornualles, pero no por Kate Middleton, quien no se ha dejado ver en el lugar, algo que ha llamado especialmente la atención.
No obstante, la ausencia de Kate Middleton ha estado más que justificada. La duquesa de Cambridge se encontraba en Manchester, a más de 300 kilómetros de distancia de Londres, haciendo frente a sus compromisos institucionales con motivo de la inauguración del memorial por el atentado en el Manchester Arena, en el que 22 personas perdieron la vida en el año 2017 durante un concierto de Ariana Grande
Kate Middleton acude junto al príncipe Guillermo a un acto en Manchester
Aunque el príncipe Guillermo finalmente la ha podido acompañar en el acto central de este día en Manchester, Kate Middleton ha llegado a la ciudad horas antes que su marido para mantener un encuentro privado con las familias de los fallecidos, lo que le ha impedido acompañar al nieto de Isabel II en uno de sus grandes días.
Posteriormente, Kate Middleton y el príncipe Guillermo han acudido al homenaje que se ha celebrado en el monumento Glade of Light, en honor a todas las víctimas. Allí, el nieto de Isabel II ha dedicado unas bonitas palabras a las familias de los fallecidos y, posteriormente, la duquesa ha depositado una ofrenda floral.
Una ocasión para la que Kate Middleton ha optado por un vestido solapa confeccionado en tejido jaspeado de color azul claro y gris de Michael Kors. Una prenda que no es nueva en su armario, sino que la estrenó en 2014, y que ha combinado con unos pendientes de abeja, el símbolo de Manchester desde la Revolución Industrial.