Las cinco costumbres de la Familia Real que la reina Letizia se ha negado a aceptar

Desde que llegó a Zarzuela, la reina Letizia ha hecho un camino en el que ha marcado territorio. Algo que ha implicado romper con algunas de las tradiciones más férreas de la familia de su marido

Helena Arriaza

Redactora digital de Lecturas

Actualizado a 24 de diciembre de 2024, 20:00

GTRES
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Hace ya más de 20 años que la reina Letizia llegó a la familia Borbón. Cuando el por entonces príncipe Felipe anunció su compromiso conla periodista comenzó para ella un camino de adaptación. Entrar en Zarzuela, prepararse para ser la reina consorte y la madre de la princesa heredera, tener relación con la familia de su marido y acostumbrarse a algunas de las tradiciones familiares fueron algunos de los retos que tenía en el frente. Pero no todos los cumplió. En cuanto a costumbres se refiere, con el paso del tiempo Letizia ha roto con algunas de ellas.

Conforme han ido pasando los años y más desde que el rey Felipe subió al trono, la reina Letizia ha marcado su propia hoja de ruta y la de su familia. Son varias las costumbres que ha implantado tanto en su día a día junto al rey Felipe y sus hijas la princesa Leonor y la infanta Sofía, como en sus apariciones públicas. Tradiciones con las que se ha desmarcado de pleno de algunas de las más destacadas de la familia Borbón. Repasamos a continuación cuáles son las más destacadas.

La reina Letizia, ajena al saludo viral de los Borbón

Resulta inevitable destacar la despedida que protagonizaron el rey Juan Carlos y la infanta Elena en el 60 cumpleaños de ella. Padre e hija recrearon, cuando ya se despedían, un instante de lo más comentado con su reverencia, señal de la Cruz y choque de manos con palmadas incluidas. Un saludo que se volvió viral en su momento y que pudimos saber que no son los únicos que lo realizan. Es una costumbre en la Familia Real que ha pasado también a las hijas de los reyes eméritos.

Un saludo que también protagonizaron la infanta Cristina y su hijo Pablo Urdangarin. El hijo de la infanta y su madre recrearon igualmente el saludo viral del rey Juan Carlos. Algo que, desde luego, nunca hemos visto hacer a la reina Letizia con sus hijas. La reina consorte intenta, por todos modos, alejarse de las tradiciones que han marcado la vida tanto de su marido como de sus hermanas.

La reina Letizia rompió con la tradición del esquí

Entre las tradiciones con las que la reina Letizia rompió en su día está la del esquí. Antaño era habitual ver a los miembros de la familia del rey Juan Carlos pasando días en la nieve e incluso algunas vacaciones de Navidad. Los eméritos, junto a sus hijos Felipe, Elena y Cristina, se trasladaban a Baqueira para disfrutar de este deporte. En los primeros años de Letizia en la familia, se le pudo ver en la nieve. Pero esta costumbre terminó. A la reina Letizia este deporte no le gustaría nada y se sentiría insegura practicándolo. Así que lejos de subirse a los esquís, no dudó en finalizar con este tipo de planes.

Letizia es mucho más cercana a la cultura. De hecho, con su llegada, se comenzó a hablar de cine, teatro y literatura con la Familia Real. Ahora es habitual que los reyes acudan a varias salas del centro de Madrid para ver estrenos. También que visiten exposiciones o se acerquen a librerías para interesarse por las novedades. Nada de esquí o vela pero sí cine y teatro.

La reina Letizia no acude a la misa de Pascua de Palma

En cuanto a eventos públicos, la reina Letizia también ha roto con alguno. Entre los más destacados, la misa de Pascua celebrada en Palma y a la que la familia acudía cada año. De hecho, fue allí donde tuvo lugar su sonado rifirrafe con su suegra la reina Sofía. En 2020, año marcado por la pandemia, doña Letizia vio el antes y el después en cuanto a esta cita religiosa se refiere. Desde entonces, aunque la celebración se ha retomado en los últimos años, ni ella, ni su marido, ni sus hijas han regresado.

Es una de las tradiciones más arraigadas de la época de Juan Carlos y Sofía que ha perdido ya toda vigencia. A la reina Letizia nunca le ha gustado estar en Palma de Mallorca en verano. En los últimos años hemos podido ver ya cierta tolerancia pero, sin duda, ha marcado su camino. Ni misa ni posado. Tan solo los actos oficiales y algunas salidas privadas que siempre están perfectamente medidas. Todo para esperar a las vacaciones particulares de los reyes y sus hijas.

La reina Letizia, sin santiguarse

Otro de los gestos con los que la reina Letizia decidió desmarcarse de las costumbres de la familia de su marido casi desde el principio, fue el de no santiguarse. Debido a sus creencias, cuando la reina Letizia acude a algún acto religioso, prefiere no llevar a cabo este gesto. Salvo en su boda o en su encuentro con el Papa Benedicto, donde sí se presignó, doña Letizia no lleva a cabo este gesto incluso sabiendo que va a ser de lo más comentado.

La reina Letizia, brinda pero sin beber

Entre los gestos con los que la reina Letizia ha marcado la diferencia, está el de brindar pero sin beber. Hace años reconoció que es abstemia. De ahí que cada vez que lleva a cabo un brindis, se acerque la copa a los labios pero nada más. Es uno de los gestos más consolidados de la reina, que no ha cambiado nunca. Letizia no bebe en público y sus hijas tampoco lo hacen. Lo pudimos comprobar con el aniversario de la proclamación del rey Felipe. Leonor, como su madre, hizo el mismo gesto de acercarse la copa.

Una lista de cinco costumbres que antes eran muy habituales en la familia del rey Felipe y que algunas siguen estando presentes en algunos de sus miembros, pero con las que la reina Letizia ha roto de pleno.

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