A sus 82 años de edad, Beatriz de Holanda continúa siendo una exreina muy activa. La soberana cedía el trono de los Países Bajos a su hijo, el por entonces príncipe Guillermo, el 30 de abril de 2013, y desde entonces lleva una vida más tranquila, pero sin haberse desligado de sus compromisos para con la Corona.
Sus 33 años de reinado -desde el 30 de abril de 1980- hicieron que se convirtiera en la reina más longeva de Holanda, y desde su renuncia volvió a retomar el título de princesa de los Países Bajos, princesa de Orange-Nassau y princesa de Lippe-Biesterfeld. También abandonó el palacio de La Haya (Huis ten Bosch, lo llaman, "la casa del bosque") para volver al castillo de Drakensteyn, cerca de Utrecht, una magnífica mansión en la que vivió antes de reinar, y donde crecieron sus tres hijos.
Después de haber permanecido prácticamente desaparecida durante el periodo de confinamiento, la princesa Beatriz reaparecía este miércoles con motivo del Día Nacional de los Juegos al Aire Libre del Fondo Nacional de la Juventud Jantje Beton, acudiendo al parque infantil de Baarn, en calidad de patrona de la organización. Allí, más de 350.000 niños participan cada año en las actividades y proyectos organizados por el centro, una organización que además presta una atención adicional a los jóvenes en situaciones más vulnerables.
Una vez realizada la inauguración de la jornada en la que la madre de Guillermo de Holanda hacía sonar una campana ante las expectantes miradas de todos los niños, la royal ha realizado un recorrido por el recinto acompañada de Jantje Beton y el coorganizador Nickelodeon.
Con ellos también ha mantenido una charla sobre la importancia de jugar y el Día del Juego al Aire Libre, así como con algunos de los voluntarios del lugar, sobre su patio de recreo y el efecto del brote de coronavirus en Speeltuinvereniging Baarn. Mientras tanto, los pequeños disfrutaban de las múltiples actividades y juegos organizados mostrando su destreza a la princesa de los Países Bajos.