Los Reyes de España se encuentran desde hace unos días en Holanda en un viaje de Estado que está dejando varios momentos para recordar. En la noche del miércoles la reina Letizia (51 años) no podía soportar estar de pie por la dolencia que sufre. Por ello, ha llamado especialmente la atención que este jueves el rey Felipe VI (56 años) haya tenido un precioso arrebato de amor al agarrar por la cintura a su esposa.
En este viaje hay muchas miradas puestas en los diferentes monarcas por diferentes detalles. Por un lado, se trata de dos de las monarquías europeas que mejor estilo tienen, en cuanto a la vestimenta se refiere. Por ello, tanto la madre de la princesa Leonor como Máxima de Holanda (52 años) han brillado en todos los actos oficiales que han tenido durante estos días. Por otra parte, también supone un paso al frente de la princesa Amalia (20 años), la heredera a la Corona neerlandesa.
El gesto de amor de Felipe a Letizia
El pasado miércoles tuvo lugar la famosa cena de gala en el Palacio Real de Ámsterdam. Llamaba la atención que en la tradicional recepción donde tenía lugar el besamanos, la madre de la infanta Sofía (16 años) estuviera sentada en un taburete. Sin embargo, todo tenía una explicación y, por supuesto, nada tenía que ver con el protocolo. Todo estaba relacionado con la dolencia que la monarca sufre en los pies por su neuroma de Morton.
De hecho, fueron muchos los que mostraron su preocupación por la Reina en esta noche tan complicada que tenía por delante con los tacones altísimos que llevaba con motivo de dicha cena. Por ello, ha sorprendido que el hijo de la reina Sofía este jueves haya tenido un auténtico arrebato de amor y haya agarrado a su mujer por la cintura, lo cual llega tras haber pasado una noche complicada debido al dolor, demostrándole todo su apoyo en estos duros momentos.
Por otro lado, este jueves se celebraba una recepción de devolución en la que los monarcas españoles agradecían el trato recibido por parte de sus iguales en los Países Bajos. Ella ha tenido lugar en el museo STRAAT de Ámsterdam, donde Letizia mantenía una charla distendida con algunos de los allí presentes. En ese momento también el hijo de Juan Carlos I ha querido tener otro gesto cómplice con su mujer y se le veía nuevamente agarrando a su esposa, mientras ambos no paraban de sonreír por lo que les estaban contando.
Letizia brilla en Holanda con sus looks
Si algo caracteriza a nuestra monarca es que luce arrebatadora en cada acto en el que cuenta con su aparición. Desde el pasado martes han sido varias las vestimentas que ha utilizado y en todas ha brillado. Tanto ha sido así que la prensa extranjera no ha podido evitar rendirse ante ella. Aunque también es cierto que tanto Máxima como su hija Amalia han hecho lo propio y han estado prácticamente al mismo nivel en todas sus apariciones.
En su primera aparición la madre de la Princesa de Asturias lució un elegante vestido tweed verde, el cual combinó con un tocado en tonos beige y utilizando algunas joyas de pasar. El plato fuerte estaba aún por llegar, el cual estaba reservado para la cena de gala del pasado miércoles. En ella la Reina escogió un espectacular vestido azul con la tiara rusa y nuevamente apostó por joyas de pasar como complementos imprescindibles.
Para esta despedida de Holanda, Letizia no ha defraudado y ha vuelto a destacar por su elegancia y estilo, el cual se podría definir como su mejor look de todo este viaje de Estado que ya llega a su fin. La Reina ha escogido un espectacular vestido ceñido del diseñador marroquí afincado en Holanda Mohamed Benchellal, el cual estaba repleto de fluidos. Además, se aprecian salpicaduras de brillos en todo el vestido que, por otro lado, hace que realce aún más su estilizada figura gracias al drapeado de la cintura.
No obstante, en este último evento que han tenido antes de emprender su viaje de regreso a España, se ha podido ver a los monarcas mucho más relajados y distendidos. Además, llama la atención que en prácticamente todas las fotografías aparecen ambos sonriendo, lo cual demuestra que su viaje ha sido fructífero tanto en lo relativo a las relaciones institucionales como en las personas, de las que tanto se ha hablado en los últimos días. Además, el hecho que la esposa del Rey decidiera sentarse en aquel besamanos por su fuerte dolor de pies, también denotaba un síntoma de confianza con los monarcas del país de los tulipanes.
Felipe VI confía en Sofía su primer acto en solitario
En medio de este viaje de Estado a Holanda, donde el Rey ha mostrado su lado más desinhibido jugando al fútbol y a baloncesto con niños con algún tipo diversidad funcional, ha salido a la luz la importante tarea que ha confiado la Casa Real española ha la infanta Sofía. Y es que Felipe VI ha tomado la decisión de que la pequeña de su casa de un paso al frente de la institución. Con Leonor en la Academia Militar de Zaragoza, parece que ya es hora de que la hermana de la heredera al trono de España tenga su propio papel en solitario frente a la princesa de Asturias.
El Rey ha encargado a su hija pequeña ser la madrina de de un concurso de fotografía de Patrimonio Nacional. Un certamen al que han llamado 'Objetivo Patrimonio. Concurso de Fotografía Infanta Sofía' en el que puede participar cualquier residente en España. Una iniciativa que según su web "busca difundir y compartir a través de imágenes el rico patrimonio histórico, cultural y natural de nuestro país y en concreto de los Reales Sitios que gestiona".