Todavía con el recuerdo de lo fue la gran boda de su hija Amán, Rania de Jordania (52 años) y Abdalá II han iniciado un viaje de Estado a Japón, pero no lo han hecho solos, y es que su hijo Hussein, como heredero al trono, les ha acompañado en esta visita histórica. Convertida en una de las royals mejor vestidas del mundo, con permiso de doña Letizia, Rania no ha defraudado con las prendas que ha estrenado en Tokio, una maleta repleta de lujo, estilo y sofisticación. 

Muy activa en redes sociales, es ella quien a través de su perfil oficial de Instagram está compartiendo muchos de los detalles de su estancia en el país oriental. "Ha sido un placer visitar al Emperador Naruhito y la Emperatriz Masako en el Palacio Imperial de Tokio. Me conmovió profundamente la cálida bienvenida", escribía Rania.